Los fanáticos de los Commanders en México podrían ser considerados “singulares”. Tal vez son los únicos que en la actual temporada que no sintieron una plena tristeza por ser eliminados, mientras que se quedaron con la satisfacción de que, por fin, su franquicia dio señales de vida después de mucho tiempo.

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Así vivió la afición de Commanders el juego ante Eagles

Esto no significa que tampoco se ilusionaron con regresar al Super Bowl por primera vez en 33 años. Al contrario, la euforia y el grito de “Hail To The Commanders” retumbó en cada espacio del Lucky Paul’s San Rafael, el restaurante donde se reúnen desde hace poco más de un lustro para disfrutar de los encuentros de Washington.

Alrededor de 70 fans se unieron en una misma voz. El color guinda de los jerseys resaltó en el establecimiento, mientras que una que otra cerveza se combinaba con diferentes alimentos justo antes de empezar el juego de la Final de la NFC ante Philadelphia. Lamentablemente, la ilusión, la emoción y el nervio a tope, por tener la posibilidad regresar al partido por el Vince Lombardi, se apagó poco a poco.

Cada uno de los balones perdidos por Washington impactaron directo en el marcador a favor de Eagles, y también en el corazón de los integrantes de “Hail To The Commanders Fans México”. Por más que chocaron las manos para el aplauso más fuerte posible, por más que se rasgaron la garganta con gritos que bien pudieron llegar hasta Pensilvania y por más que se negaban a creer en otra cosa que no fuera la victoria, Philadelphia es quien regresó al Super Bowl.

“No se esperaba nada de ellos y llegamos hasta la Final de Conferencia. Eso me hace sentir satisfecho, pero sabemos que la siguiente temporada tenemos la vara muy alta”, dijo Ernesto Arellano.

Hubo nerviosísimo hasta en los últimos minutos

En los minutos finales y con su equipo con más de 20 puntos abajo, los aficionados optaron por comenzar una despedida con un sorteo. Solamente por ir a la reunión, los que acudieron a la cita tuvieron la oportunidad de ganarse playeras, tazas, toallas, parches y toda memorabilia posible de los Commanders.

Así, mientras su equipo simplemente terminaba el trámite por paliza en contra, los líderes del grupo agradecieron la presencia durante la temporada y expresaron sus deseos de, algún día, ser el club de fans oficiales de Washington y certificados por la NFL. Un proceso largo, tedioso, pero que se mantiene como el sueño principal.

Algunos abrazos, fotos, videos, y cervezas después, los fans dieron el último canto de guerra de la temporada y cerraron una historia llena de emociones como hace mucho tiempo no podían disfrutar. Con Jayden Daniels como quarterback, ahora el límite de sus sueños es el cielo, aunque para descubrirlo tendrán que esperar siete meses, hasta que empiece la siguiente temporada.

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