El derbi en el Olímpico de Atenas se pintó de verde. Panathinaikos aprovechó los errores del AEK de Atenas para llevarse uno de los clásicos de Grecia, luego del 1-0 en la fecha 19 del futbol helénico.

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El clásico ateniense tuvo a dos equipos que pelearon con sus propios estilos. El local comenzó con la posición del balón, pero la visita, con el mexicano Orbelín Pineda desde el arranque, quiso contragolpear en todo momento.

El uruguayo Pellistri fue el más peligroso para los verdes. Sus constantes desbordes lograron abrir huecos en una zaga en la que Mitoglu y Vida la pasaron mal con los constantes centros que el capitán Ioannidis buscó.

De un momento a otro, un error le costó caro al equipo del ex Chivas. Pellistri fue habilitado en el área, con desesperación en sus movimientos, Strakosha salió errático y derribó al charrúa. El silbante del encuentro no dudó y marcó la pena máxima. El VAR revisó la jugada y se confirmó. Ioannidis tomó el esférico, tomó vuelo y con un zapatazo de derecha, sacudió la red del AEK.

Después de la anotación, Panathinaikos no bajó el ritmo. Durucuc y Pellistri continuaron con sus desbordes, el segundo se veía más cerca que un posible empate. Pineda, Jonsson y Pereyra no pesaron en el medio campo. La batalla por Atenas se detuvo por unos minutos con el descanso.

En el complemento, los errores volvieron a aparecer. La salida de Gerasimos Mitoglou se notó. Szymanski, su remplazo, rebanó una pelota. Ioannidis la tomó y disparó para volver a vencer a Stakosha. El VAR evitó el segundo de la tarde por una supuesta falta del capitán verde.

Orbelín Pineda no pudo hacer nada en la derrota del AEK

Matías Almeyda movió su banquillo con el empate en la mente. Anthony Martial se fue para darle ingreso a Frantzdy Pierrot, también entró Ljubicic y Paolo Fernandes. Orbelín, en ese momento, tomó un rol distinto a buscar atacar. El nacido deportivamente en Querétaro fue habilitado como segundo contención.

Fernandes tuvo el empate en los minutos finales. También Pierrot, ambos erraron frente a un Dragowski que atajó las que tuvo y se quedó en el suelo cuando la presión fue mayo por parte del visitante.

No hubo más, Orbelín Pineda poco pudo hacer en el clásico ateniense, que se pintó de verde de nueva cuenta y pone tercero al AEK, dos puntos por debajo del propio Panathinaikos y ya a seis del líder de la liga helénica, el Olympiacos.

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