16, enero 2025 - 8:11
Renata Zarazúa cayó ante la italiana Jasmine Paolini / Foto: Reuters
No es que gusten las derrotas, pero Renata Zarazúa demostró que puede jugar de igual a igual ante cualquiera. No se guardó nada, sin embargo, el cometido era complicadísimo frente a la cuarta mejor del mundo. La mexicana se despidió de pie del Abierto de Australia 2025 dentro de la modalidad de singles femenil luego de caer 2-6 y 3-6 frente a Jasmine Paolini.
Zarazúa buscó acrecentar su historia en el primer Grand Slam del año luego que en la primera fase venció a la estadounidense Taylor Townsend en tres sets por parciales de 6-7 (8-6), 6-1 y 6-2. No obstante, el sueño terminó para la mexicana, quien disfrutó de la experiencia de jugar nada más y nada menos que en la Rod Laver Arena, la cancha más imponente de Melbourne.
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Zarazúa fue apoyada en el Rod Laver Arena de Australian Open?
La mexicana, 70 del ranking mundial de la WTA, resistió una hora con 16 minutos en un partido en el que en términos generales sufrió a la hora de tener el saque en su poder. Irónico, cuando en esas condiciones la mayoría de los tenistas toma ventaja.
Con los gritos de “México, México” y el “Vamos, Renata”, la capitalina afrontó este examen en el que propició la ilusión cuando de inmediato rompió el saque de su rival para adelantarse en el electrónico 1-0. Paolini se percató de inmediato de que no sería sencillo enfrentar a la tricolor, por lo que se despabiló para poner todo en orden.
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Con buenas devoluciones la italiana se recuperó, empató por la misma vía del rompimiento, aguardó su saque y volvió a quebrar a la mexicana para ponerse 3-1 y a partir de ahí se encaminó al triunfo en la primera manga. Zarazúa sufrió para mantener el saque y eso lo aprovechó su rival para imponerse 6-2.
¿Cómo fue el segundo set del partido de Renata Zarazúa y Jasmine Paolini?
Para el segundo set se avecinaba lo peor para la tricolor con el 2-0 en contra cuando tenía la obligación de ganar para forzar a un definitivo capítulo. La desesperación parecía ser otro rival en el juego, pero Renata Zarazúa dio una muestra de que cada vez más se acostumbra a estos escenarios y estas pruebas, no por nada disputó su quinto Grand Slam consecutivo.
Poco a poco la mexicana intercambió los papeles a pesar de ir 4-1 por detrás del marcador. Defendió su saque, quebró a la italiana y recortó distancias 4-3 tras protagonizar buenos puntos en el que se apreció la variedad que puede plasmar en la cancha, desde el fondo o pegada a la red. Esa situación causó cierta impaciencia en Paolini.
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El esfuerzo ya no le dio para más a Zarazúa. La italiana le volvió a romper la bola y con el saque en su poder no desaprovechó para definir el encuentro con punto, set y partido para el 6-3. Un descalabro que sin duda dolió, pero que permitió a la mexicana irse con la cabeza en alto en su segundo enfrentamiento de la temporada contra una top ten. Sabe que hay mucho margen de mejora.