Cuando Humberto González subía al encordado no había rival alguno que le infundiera temor. Sus 43 victorias lo ayudaron a construir una carrera fuerte en la que se hizo de un buen dinerito, sin embargo, su triunfo más importante fue el de emprender, alejarse de los errores de otros campeones mexicanos que perdieron su fortuna por los vicios y las malas compañías.

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La Chiquita González siempre fue guiado por su padre para tener un futuro próspero. Es así que se hizo de salones de fiesta, carnicerías, una casa de apuestas y recientemente de locales de marquesitas, el último de ellos inaugurado este fin de semana en Avenida Universidad.

“Fue por el postre que hace tiempo entramos en Neza”, reveló a ESTO antes de explicar la razón por la que decidió entrarle a las marquesitas.

“Yo tengo lugares para hacer fiestas y no podíamos hacerlas porque la pandemia estaba muy fuerte. Hace más de tres años que estuvo la pandemia empezamos con el postre. No podíamos tener gente, y me salió muy bien. Lo conocimos allá en Mérida y lo hicimos muy rico, vienen de allá y me preguntan qué le echamos, pues polvos mágicos para que esté bien buena la marquesita”, presumió.

El campeón, como le llaman sus amigos, explicó que conoció el postre en Yucatán, aunque entonces no se comía ninguna porque estaba con dietas de cara a sus peleas.

“En Yucatán la veía, y yo haciendo las cosas muy bien, pasando la veía, veía los postres y no podía comérmelos porque estaba a dieta. Ahora, cada que voy me como tres, cuatro o cinco“, afirmó. “La que más me gusta es la clásica, queso de bola con lechera, es la que siempre me como en varios locales, voy a eso”.

¿QUÉ CONSEJO LE DA HUMBERTO GONZÁLEZ A LOS FUTUROS BOXEADORES?

Para la Chiquita González, es claro que el motor para sus emprendimientos es la familia y la unión que tienen siempre.

“Yo le estoy echando muchas ganas, tengo una familia muy unida y estamos echándole las ganas. Tengo ahí varios negocios que hago, salón de fiestas, tengo un lugar que hacemos juegos, hay de todo. Que se hagan bien los negocios y echarle ganas, estamos unidos con la familia, siempre hay que echarle ganas para que nos vaya bien. Yo le echo ganas con todo, también tengo carnicerías”, explicó.

Le pidió a los futuros boxeadores que no pierdan la cabeza con el dinero y que aprendan a hacer inversiones para asegurar su futuro.

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“Que le echen ganas y vean en qué van a invertir, aunque sea un montón de dinero siempre se acaba. tienen que salir adelante, ver qué van a hacer, en qué van a invertir, hay que checar y sí se puede”, cerró.