La comunión entre Cruz Azul y su afición no tiene fin. Tal como sucedió previo a la remontada ante los Xolos de Tijuana, una marea celeste se dio cita en el hotel de concentración del equipo comandado por Martín Anselmi, ahora para dar el último aliento antes de buscar el pase a la final del Apertura 2024 ante América.

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Afición de Cruz Azul le dedicó un cántico a Martín Anselmi

En las afueras del hotel Galerías Plaza San Jerónimo se respiró un ambiente de ilusión, fueron cientos los que pese al frío del sur de la ciudad arribaron con banderas, globos y carteles de ánimo para sus ídolos.

Tanta es la ilusión que el estratega uruguayo le ha impregnado a los seguidores cementeros que los globos con el número 10 abundaron en todo lo alto. “De la mano de Anselmi todos la vuelta vamos a dar”, fue la leyenda que los futbolistas vieron al salir del recinto.

La organización fue fundamental para que la fiesta se disfrutara. Los miembros del grupo ‘Logística y Animación’ pidieron que los niños que llegaron con la esperanza de ver lo más cerca posible a los jugadores, pasaran al frente. El eco de las trompetas y los tambores llamó la atención de los demás huéspedes del gran hotel, que asombrados por la convocatoria del conjunto de La Noria, se asomaron desde sus ventanas.

En punto de las 20:00 horas, como ya es costumbre, la plantilla salió para saludar. El primero fue Erick Lira, seguido de Ángel Sepúlveda. Ambos fueron los que se mantuvieron al frente de sus compañeros para aplaudir constantemente el gesto de sus seguidores.

El odio deportivo por las Águilas es evidente. Una manta que atravesó todo el contingente envió un mensaje claro y contundente: “Odio eterno al fútbol moderno”. Lo que llamó la atención fue la sustitución de la última vocal por el escudo de la televisora dueña del acérrimo rival, ‘Telerisa’.

El hombre de la noche fue Martín Anselmi. La figura del argentino tiene enamorada a la afición celeste. El amor entre ambas partes es evidente, mientras los coros “Mira, mira que alegría. Mira, mira que emoción, que de la mano de Anselmi vamos a salir campeón”, el entrenador sacó su celular para grabar el momento.

Una bandera llegó hasta sus manos, y antes de agitarla la estiró para ver la imagen que tenía impresa. El peculiar festejo en el gol de Ángel Sepúlveda ante Tigres, ese en el que gritó “Así tenemos los huevos”, se ha vuelto una mantra de su gente. Su foto fue la que adornó el pedazo de tela que le sacó una sonrisa.

Pasados los 20 minutos de fiesta y algarabía, la plantilla posó para la postal del recuerdo antes de regresar a sus habitaciones. Agradecidos por la serenata. Los futbolistas le brindaron un aplauso a su gente, esa con la que se unirán este domingo en el Ciudad de los Deportes para buscar una final más.

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