Mike Tyson regresó a lo grande. No atraviesa sus mejores años, incluso su último combate de manera profesional sucedió en 2005, pero Mike Tyson sigue siendo Mike Tyson y sin la necesidad de subirse al ring ante Jake Paul fue capaz de romper el récord de taquilla que tenía en su poder el boxeador mexicano Saúl “Canelo” Álvarez.

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Horas antes de que se subiera al encordado para pelear frente al Youtuber se dio a conocer que la recaudación de dinero superó los 17,8 millones de dólares para ser el evento de combate que más ingresos ha generado en el estado de Texas entre combates de boxeo o de artes marciales mixtas.

Por afición, por morbo o por cualquier otra razón, pero la gente respondió para abarrotar las gradas del AT&T Stadium, casa de los Vaqueros de Dallas de la NFL, para mirar a “Iron Mike”, de 58 años.

Los 17,8 millones de billetes verdes acumulados en entradas en la disputa entre Tyson y “The Problem Child”, de acuerdo con Most Valuable Promotions casi duplicó lo que “Canelo” Álvarez generó en su pelea del 8 de mayo de 2021 frente a Billy Joe Saunders, la cual recaudó cerca de los nueve millones de dólares. En aquella ocasión el tapatío venció al británico para obtener el título de los supermedianos de la OMB.

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La edad de Mike Tyson reflejó su desempeño en el ring

En una pelea desigual, empezando por la edad, Jake Paul venció sin complicaciones a un deslucido, pero atrevido Mike Tyson, quien tuvo un regreso descafeinado en el que apenas pudo conectar 18 golpes a su enemigo en un evento que quedó para el recuerdo ante un llenazo en el AT&T Stadium, de Arlington, Texas.

Después de que Tyson cumplió con una entrada más serena respecto a Paul, quien ingresó arriba de un lujoso auto convertible y con la canción “In the Air Tonight”, misma que cantó Mike en la película “The Hangover”, llegó la hora de la verdad.

En el ring se apreció al siempre exterminador Tyson o al menos esa fue la intensión en los primeros rounds, pero la realidad es que sí pasaron factura sus 58 años y por supuesto sus problemas físicos, sobre todo, el más visible, su inconveniente en la pierna derecha, donde portó una rodillera.

La idea y lo que bien se aprende nunca se olvida, “Iron Mike” buscó hacer daño con el jab y su potente derecha, sin embargo, el físico ya no le acompañó y por momentos estuvo quieto y se agarró de su defensa para evitar que Jake Paul lo golpeara.

Jake Paul cuidó el legado de la leyenda

Paul se enteró de las dificultades de Tyson, sobrellevó el combate, respetó a la leyenda y solo se cuidó de no recibir daño, sabía que sí quería podía evidenciar a Mike, más cuando en el quinto le alcanzó a pegar con gancho de izquierda y exhibió sus mejores combinaciones.

La espectacularidad que en sus mejores años se apreció quedó de lado, le costó muchísimo el combate a Mike Tyson, quien sufrió para atacar y fue meritorio el hecho de terminar de pie ante un joven de 27 años que sigue al alza dentro del boxeo y le rindió homenaje a su rival antes de que terminara el combate.

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Una pelea a ocho rounds que dejó mucho que desear debido a que el público esperaba más brillantez, pero eso lo brindó Mike Tyson en los años 80 y 90.