El arquero mexicano Matías Grande se acercó lo más que pudo a las medallas en la Final de Copas del Mundo de Tiro con Arco. Sin embargo, pequeños detalles lo privaron de subir al podio ante su gente, en Tlaxcala. El olímpico en París 2024 cayó en el duelo por la medalla de bronce ante el brasileño Marcus D’Almeida, un partido sumamente cerrado que mantuvo al público al filo de sus butacas.

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Con el bronce en juego, Matías mostró todo su temple. Al arquero mexicano le tocó tirar segundo, una cuestión no menor, porque durante todo el duelo tuvo que responder a los embates del brasileño.

Fueron sets apasionantes los que se vivieron frente al Palacio de Gobierno de Tlaxcala. En el primero, nada menos, Grande y D’Almeida pusieron puro 10 en la pizarra. Para repartir unidades, en la segunda tanda la dinámica fue parecida, al igualar con 28 unidades.

El punto de quiebre llegó en el tercer parcial, cuando Matías Grande no pudo cerrar con un 10 que le dio los puntos al brasileño y le permitió tomar una ventaja que a la postre sería definitiva. La presión caló fuerte en Matías y le hizo perder la precisión que hasta entonces había mostrado. D’Almeida se impuso en el cuarto set para llevarse la victoria con marcador de 6-2 y colgarse la medalla de bronce.

Hasta entonces, la jornada había sido buena para el arquero mexicano, sobre todo en el duelo de cuartos de final. Grande se vio sumamente certero frente al experimentado italiano Mauro Nespoli al llevarse el partido con marcador de 6-2. A pesar de enfrentarse a un medallista olímpico, el apoyo del público motivó a Matías y lo llevó a la siguiente fase.

Ya en las semifinales, Matías Grande se sacó la rifa del tigre y enfrentó al campeón olímpico Kim Woojin. El mexicano le plantó cara a un arquero que puede catalogarse como histórico y lo sorprendió al llevarse el primer set. Incluso la sorpresa se prolongó al empatar en el segundo parcial y ponerse adelante 3-1.

Matías Grande no pudo ante el coreano Woojin

Justo en el momento de más presión, sin embargo, Woojin respondió como todo un grande y puso en la diana tres tiros perfectos para empatar el duelo.

El surcoreano tomó ventaja en el cuarto parcial para ponerse 5-3 y liquidó la contienda en el quinto y decisivo set para llevarse la victoria 6-4. Matías vendió cara la derrota y con dos dos dieces y un nueve logró arrebatarle un punto, pero necesitaba ganar el parcial para seguir con vida.

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