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Mira

8, agosto 2024 - 3:38

┃ Josué Padilla Márquez

Aranza Vázquez tuvo un clavado de ceros, que la dejó fuera de la final de trampolín 3m. FOTO: Luis Garduño | ESTO

La sensación que define lo que ocurrió con la clavadista Aranza Vázquez en el Centro Acuático es como aquella que queda después de un balde de agua helada. La mexicana saltaba con tranquilidad rumbo a la final de París 2024 en el trampolín de 3 metros, cuando de pronto, un clavado fallido en la cuarta ronda la mandó al fondo de la clasificación.

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Fue un momento de descontrol el que se vivió en la fosa. Aranza se paró en el trampolín, inició su recorrido, pero algo en el camino le impidió tomar altura. La mexicana aún buscó realizar sus vueltas, pero cayó completamente acostada.

Apenas salió del agua, la mexicana levantó la mano y pidió la intervención de los jueces, con la intención de repetir el salto. Aranza se acercó con el juez principal y explicó su molestia, sin embargo, después de unos minutos de revisión, finalmente determinaron que su petición no procedía. En la pizarra, la acumulación de ceros terminó con su esperanza de clasificar a la final.

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¿Qué reclamó Aranza Vázquez sobre su clavado fallido en París 2024?

De acuerdo a las primeras versiones, antes de realizar su ejecución Aranza Vázquez escuchó un ruido que la sacó de concentración. De acuerdo a las reglas, sin embargo, la clavadista debió detener su marcha y argumentar ante los jueces lo ocurrido. Como no fue así, la petición no procedió. Esto también generó que el clavado fuera calificado con cero, dado que la mexicana no lo aceptó.

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Tras la decepción, la clavadista solo se puso sus audífonos y se fue a la parte trasera de la alberca. Aranza todavía encontró la fuerza para regresar y tirar un último clavado lleno de valor. Una vez finalizada su ejecución, la mexicana se abrazó con su entrenador y rompió en llanto. Un solo error costó el sueño de una final olímpica y una eventual medalla. Aranza abandonó el centro acuático sin dar declaraciones a los medios de comunicación.

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