PARÍS.- La capital francesa no quiso que nada empañe la fiesta olímpica, por lo que determinó “limpiar” un campamento de personas sin hogar que protestaban en la Plaza de la Bastilla.
Alrededor de las 20:30 horas, tiempo francés, la policía local comenzó a “romper” la protesta y a llevarse en camionetas, como si fuera parte de un decomiso, las casas de campaña que habitaban los quejosos. Los uniformados cargaban las improvisadas chozas, con los aros de París 2024 como testigos de ese acto de represión.

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“Francia, campeón del mundo en mala vivienda”, decía una de las mantas que formaban parte del reclamo.
De acuerdo con activistas en pro de los derechos de las personas sin hogar, las autoridades tomaron la manifestación como “una alteración del orden público”, por lo que determinaron retomar el control de la emblemática plaza parisina, ubicada a unos 35 minutos de la Torre Eiffel.

Poco a poco, los policías comenzaron a realizar un círculo alrededor del campamento. Se pudo notar la presencia de varios elementos con pistolas de balas de goma, listos para actuar en caso de que fuera necesario. Los inconformes comenzaron a cantar y aplaudir en señal de resistencia. Momentos más tarde, se endureció el operativo, ya con la aparición del cuerpo de granaderos.
Los efectivos comenzaron a gritar para que los curiosos y la prensa se alejaran. Hubo reclamos de espontáneos en contra del actuar de los guardianes, porque, realmente, no era una protesta violenta, ni mucho menos.

La policía desalojó a la gente que protestaba en Plaza de la Bastilla en París por la falta de viviendas

Las mujeres del campamento comenzaron a tomar a sus hijos y a guardar sus cosas, principalmente cobijas, para evitar que los agentes se las llevaran, junto con las casas de campaña.
Los hombres comenzaron a retirar las mantas y a alejarse sin intención de provocar la escalada del conflicto. Había zozobra, pero nunca un momento que detonara una chispa que desatar una trifulca.
Los organizadores del campamento tenían la intención de permanecer en la Plaza de la Bastilla durante varias noches, con la finalidad de ser visibles ante las autoridades y obtener un alojamiento. Sin embargo, aceptaron el retiro de su plantón sin ningún problema.

Este acto se dio en medio de acusaciones de la organización El Reverso de la Medalla que ha documentado que existe una “limpieza social” para que París pueda dar una imagen agradable al mundo, durante los Juegos Olímpicos, que terminan el próximo domingo 11 de agosto.

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