Cuando Ale Orozco recibió la noticia de que iba a ser la abanderada de la delegación mexicana para París 2024, en sus primeras palabras dio una pista de su futuro, en París 2024 probablemnete sería su último clavado. La oportunidad presentaba todos los elementos para dar paso a un fin de ciclo, cerrar su carrera en la plataforma con dos medallas olímpicas colgadas de su cuello, en sus cuartos Juegos Olímpicos, a los que llegó por pura determinación.

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La consciencia plena de que esta sería su última competencia dio a la clavadista la oportunidad de disfrutar la tarde con intensidad. Las lágrimas que salieron de sus ojos al terminar la ronda confirmaban su retiro.

“La verdad es que fue un día de muchas emociones. Yo creo que desde que me levanté, sabía que era una final olímpica. Era una competencia que quería vivir, sentir, disfrutar, darme la oportunidad de cada escalón, cada clavado, cada momento, hacerlo parte de mi historia”, dijo Ale.

La clavadista tomó con humor la paradoja que supuso su último clavado. Ale se tiró al vacío y su entrada fue un tanto rodada, como si fuera imposible parar el torbellino que traía dentro.

Ale Orozco no se reprocha su último clavado

“La verdad, un clavado no me define. Lo quería hacer mejor”, dijo entre risas. “Pero creo que de verdad estaba muy emocionada. Hasta temblaba de saber que era el cierre de muchas cosas, el cierre de muchos años, de un proceso también que fue difícil. Estar aquí en París, todo lo que vivimos, y creo que era el último clavado de un cierre, de un ciclo de resiliencia, de aprendizaje, de mucho carácter, de no tirar la toalla, y de mucha gente también, de verdad, de muchas personas que dieron todo por mí. Entonces, eso era mi pensamiento. Yo creo que traía tanto adrenalina que por eso tuve ese fallo. Pero me siento muy tranquila”, dijo.

La calma que Ale proyectaba arriba de la plataforma contrastaba con los latidos de su corazón al ver el apoyo qué caía desde la grada. “A diferencia de hace cuatro Juegos, de Londres, que era una niña, no dimensionaba dónde estaba parada, hoy fue todo lo contrario. Sabía perfectamente lo que iba a vivir, lo que iba a sentir, lo que podía pasar y cómo iba a estar también mi familia, mi gente, las gradas, todo el apoyo. Creo que estaba consciente y lo sentí. Sentí cada apoyo, cada aplauso, cada corrección, cada gota de agua”.

EL LEGADO DE ALEJANDRA OROZCO

Ale Orozco cierra su carrera con la plata que cosechó en Londres 2012, junto a Paola Espinosa, y el bronce en Tokio, junto a Gaby Agúndez. La carrera de la clavadista cambió por completo a los 15 años, cuando subió al podio en su primera experiencia olímpica.

“Fue algo de una montaña rusa, todo el tiempo lo viví, lo sentí así, creo que desde que empezó mi carrera siempre tuve una mochila con mucha expectativa, con mucha presión, con mucha esperanza, pero también con este autosabotaje interno, siempre con mucha duda de saber si lo iba a lograr o no, si iba a ser suficiente o no, y creo que así fue mi carrera, pero también pude utilizar todo eso a mi favor, entonces me quedo con que no le cambiaría nada, porque cada victoria o cada derrota me dio un nuevo impulso para seguir”.

¿Qué va hacer Alejandra Orozco después del retiro?

Ale Orozco extrañará las largas jornadas en las que, junto a su entrenador Iván Bautista, daba vida a la rutina que supone ser deportista de alto rendimiento. El retiro le presenta la otra cara de la vida, el poder pasar tiempo con su familia.

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“Quiero ir con mi familia, quiero estar con ellos, el deporte se vive 8 horas en la alberca, pero en realidad es algo de 24 horas, todo gira alrededor de esto y también ellos han sido parte de mi raíz, los que me han regresado, los que me han impulsado, quiero vivir con ellos, disfrutarlos, apapacharlos, también seguir conociéndome el otro lado de la moneda, este proceso también creo que conocí a una Ale deportista, pero también a una Ale solo Ale y ese es el otro lado que seguir, saber qué quiere hacer, hacia dónde quiere impulsar y hacia dónde quiere seguir con las enseñanzas y los aprendizajes que le dejó la alberca”.

Ale Orozco llora con emotivo video de su primer clavado olímpico

Tras el emotivo momento que supuso anunciar su retiro, Ale Orozco rompió en llanto al ver un video que el Comité Olímpico Mexicano subió a sus redes sociales. En él, se narra parte de su carrera y el extraordinario legado que dejó la clavadista. La narración de Antonio Rosique conmovió a la clavadista.
“No me hagan llorar”, dijo Ale, lo cierto es que un momento como este no se puede vivir de otra manera. La mexicana se despidió de las fosas como una de las grandes de su disciplina.