De manera sorpresiva, los Seahawks anunciaron la salida de Pete Carroll, quien fuera su entrenador en jefe durante las últimas 14 temporadas. El veterano coach de 72 años dejará el cargo convertido en una auténtica leyenda de Seattle tras haberle dado a la franquicia su primer y único Super Bowl.

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La noticia sorprendió a propios y extraños, sobre todo después de una temporada en la que los Seahawks compitieron hasta el final por un lugar en la postemporada. El hecho de quedar fuera de los playoffs, sin embargo, fue determinante para que Jody Allen, presidenta de la organización, tomara la decisión. Carroll ahora se desempeñará como asesor del equipo.

Los Seahawks dieron a conocer la noticia a través de sus redes sociales. “Después de reuniones reflexivas y una cuidadosa consideración para el mejor interés de la franquicia. Hemos acordado amistosamente con Pete Carroll que su papel evolucionará de entrenador en jefe a permanecer en la organización como asesor. Pete es el entrenador más ganador en la historia de los Seahawks, trajo a la ciudad su primer título de Super Bowl y creó un tremendo impacto en los últimos 14 años en el campo y en la comunidad. Su experiencia en el liderazgo y la construcción de una cultura de campeonato continuará como parte integral de nuestra organización en el futuro. Pete siempre será parte de la familia de los Seahawks”, se lee en el comunicado.

Tras su llegada al equipo, en la temporada 2010, Pete Carroll rápidamente logró convertir al equipo en una franquicia contendiente. El entrenador en jefe llevaba tiempo sin dirigir, tras su salida de los Patriots, en 1999. Sin embargo, fue como si en todo ese tiempo hubiera recargado energía.
Intenso como pocos, atento a todos los detalles desde la banda mientras masticaba su entrañable chicle. El entrenador en jefe logró construir unos de los equipos más temibles de los últimos años, no solo a la ofensiva, de la mano de Russell Wilson en su versión estelar, sino también en defensa, con la famosa Legión del Boom.

En 14 temporadas, Pete Carroll dirigió un total de 227 partidos, con un récord de 137-89-1. De esas 14 campañas, solo en tres terminó con récord perdedor, lo cual habla de su sello, el mantener un equipo competitivo, sin importar las circunstancias.

Lejos de los números, Carroll logró trascender en su legado gracias a los campeonatos. Acaso el mejor parámetro para medir el impacto de un entrenador en jefe. Los Seahawks llegaron al Super Bowl en la temporada 2013 y lograron imponerse a los Broncos de Peyton Manning con un apabullante 43-8. Aquella victoria enmarcó el único título que hasta ahora puede presumir Seattle.

No es que el equipo de Carroll no haya estado cerca de otro triunfo, al contrario, podría decirse que pocos equipos estuvieron tan cerca de la gloria sin poderla conseguir. Un año después del triunfo frente a los Broncos, los Seahawks volvieron a llegar al Super Bowl, ahora con los Patriots de Tom Brady como rivales.

Seattle perdía por cuatro puntos a falta de 26 segundos para el final del partido, sin embargo, la ofensiva de Russell Wilson estaba en la yarda 1 del rival; es decir, tenía todo a su favor para convertirse en bicampeón. Entonces vino la polémica llamada de Carroll, al mandar pase, cuando tenía al corredor Marshawn Lynch dispuesto a conseguir esa yarda que los separaba del triunfo. Los Patriots interceptaron y Carroll quedó incrédulo en la banda, con las manos apoyadas en las rodillas y los ojos bien abiertos.

Pete Carroll destacó la consistencia de los Seahawks

En una emotiva conferencia de prensa, Pete Carroll se despidió de los Seahawks. A pesar de que aún seguirá ligado a la institución como asesor, no estará más en su cargo como entrenador en jefe. Durante los 14 años de su gestión, Seattle se caracterizó por ser un equipo competitivo, una de las cualidades que más llenó de orgullo al coach.

“Estoy encantado de que hayamos tenido esta racha. El nivel de consistencia que demostramos es para sentirse orgulloso. Es difícil hacer lo que hicimos, es difícil ganar como lo hicimos, es difícil hacerlo por tantos años. No importaba si era fuera de casa, el equipo mostraba esa calidad para hacerlo”, dijo Carroll.

Fiel a su estilo, al ser cuestionado por el momento más especial de toda su estancia en Seattle se dio en Nueva York, el escenario en el que derrotaron a los Broncos para ganar su primer Super Bowl. “Mi momento favorito fue estar en el escenario en Nueva York y encontrar a Glena entre la multitud“, dijo, refiriéndose a su esposa.

Carroll aprovechó la oportunidad para agradecerle a todos los coaches que formaron parte de su staff. “Estoy muy agradecido con los entrenadores que han estado con nosotros durante tantos años. Además, todos los entrenadores que han estado aquí durante los años anteriores soportaron mis cosas y encontraron formas de darles vida a diario”, dijo.

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También tuvo palabras para los jugadores que tuvo la oportunidad de dirigir. “Esta liga se trata de los jugadores. Sin que estos tipos hagan lo que hacen, no hay nada… En mi opinión, siempre deberíamos celebrar a esos tipos.