Los aficionados lo pagaron. Hasta el momento las actividades del Gran Premio de Las Vegas han desentonado con el entusiasmo de millones de aficionados a la Fórmula 1 con el que se esperó esta competencia norteamericana, algo que lamentó Checo Pérez.

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El colorido y la espectacularidad que se apreció en un principio con esa esfera gigante que dicta los tiempos y que exhibe imágenes alusivas a la F1, la replica de la Torre Eiffel, las luminosas fuentes y los brillantes casinos poco a poco se fueron apagando o mejor dicho pasaron desapercibidos, pues lo que realmente importaba, lo que ocurría en pista, terminó por ser un fiasco.

Checo sabe que los aficionados fueron los más afectados, por lo que lamentó lo sucedido en las dos primeras prácticas libres. La primera sesión se caneceló apenas con nueve minutos de actividad a causa de una alcantarilla que perjudicó a Carlos Sainz. La segunda los fanáticos no pudieron disfrutar las acciones ya que fueron retirados de manera prematura del trazado. Los organizadores debían despejar las calles de Las Vegas alrededor de las 4:00 horas.

De tal modo que el tapatío del Red Bull empatizó con esos millones de aficionados que se vieron afectados en el primer día de actividades de este Gran Premio de Las Vegas, que por ahora ha dejado mucho que desear.

“Lo siento mucho por los aficionados. Estoy seguro de que podremos darles una buena carrera, un buen fin de semana de carrera”, declaró Sergio Pérez.

Además, Pérez se siente como en casa por el respaldo que recibe en Estados Unidos. Por eso su compromiso en la pista es realizar una buena carrera durante la madrugada de este domingo y podría amarrar el subcampeonato.

A pesar de los inconvenientes en el comienzo de las hostilidades, Sergio resaltó que rodó a ritmo de carrera y reconoció que el trazado callejero de la Ciudad del Pecado presenta complicaciones para los pilotos sobre todo en agarre durante algunas zonas.

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“Fue un día muy difícil con todo lo que hemos tenido. Pero en general es un día positivo, con mucha información. Pudimos girar en ritmo de carrera y creo que eso es positivo para preparar el Gran Premio. En general, es un lugar desafiante. El nivel de agarre es bastante bajo, lo cual hace las cosas mucho más complicadas”, manifestó el mexicano.

Aunque el jalisciense se vio mejor que su rival por el subcampeonato, Lewis Hamilton, es consciente de que nada está escrito y admitió que los Ferrari lucen poderosos, pues así lo reflejaron en el arranque de las actividades.