A pesar de que en México era uno de los mejores defensas de la Liga MX, Johan Vásquez recibió un golpe de realidad. En su llegada Italia, confiesa que todo mue muy raro para él y que incluso se sintió avergonzado de su forma de defender.

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El defensa seleccionado nacional se consagró como uno de los mejores en Pumas, que le dio la libertad de ir a Europa. Una vez que llegó ahí, se dio cuenta que no era tan bueno como creía, algo que lo hizo sentir mal.

“Yo cuando estaba en México pensaba que defendía, que hacía muy bien las coberturas. Cuando llegué acá la vida y el futbol te dan una cachetada de que hay que aprender, hay que seguir aprendiendo muchas cosas”.

Johan resalta que durante los entrenamientos, el entrenador lo llamaba por su nombre y le corregía algunos aspectos. Eso fue lo que hizo que se avergonzara de su manera de jugar al futbol.

“Recuerdo en mis primeros entrenamientos en Genoa, me daba un poquito de vergüenza a mí porque el míster me paraba y decía mi nombre en voz alta y me decía las cosas no se hacen así, como si el entrenamiento solo fuera para Johan Vásquez”.

JOHAN VÁSQUEZ SUFRIÓ POR EL IDIOMA

Además de que la forma en que jugaba lo llegó a avergonzar, el idioma fue otro factor importante en su contra. Vásquez asegura que al escuchar que lo llamaban y le decían cosas, entendía que estaba haciendo algo mal.

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A pesar de todo, Johan no se dio por vencido y tomó de la mejor manera las correciones que le hicieron, ya que al final son para mejorar en el aspecto defensivo.

“Al principio sí te da el ego o la vergüenza de que no hablen de ti y te tratas de esconder, pero bueno, no jugaba. Lo que quería era demostrar y era aprender. Lo tomé por las buenas, el otro tema era que solo escuchaba mi nombre, pero no entendía lo que decían en italiano, pero como era futbol sabía que algo estaba haciendo mal”.