Luego de un Pedigree acompañado del Curb Stump, Seth Rollins derrotó a Drew McIntyre y retuvo el campeonato mundial pesado de WWE. Seguido a ello, Damian Priest intentó canjear el maletín Money In The Bank pero falló en el intento.

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Sami Zayn llegó para arrebatarle el objeto que le otorga una oportunidad por el campeonato mundial que desee en el momento que quiera, para después correr entre la multitud de fanáticos presentes en Crown Jewel.

Incluso, ya en los vestidores, Drew McIntyre estaba sentado mientras reflexionaba su derrota, hasta que Rhea Ripley llegó y, con su mirada, le dijo: “te hubieras unido a nosotros”. Esto porque la líder del Judgment Day ha invitado al psicópata escocés a unirse al equipo en más de una ocasión, pero éste se ha negado.

Esto da a entender que en un futuro, Drew hará su cambio a heel para revitalizar su carrera, ya que como face, ha perdido sus últimas tres oportunidades titulares (Roman Reigns en Clash at The Castle 2022, Gunther en SummerSlam 2023 y Seth Rollins en Crown Jewel).

Adam Pierce, General Manager de RAW, le cuestionó a Drew sus acciones por no intervenir en los ataques de The Bloodline hacia los demás luchadores, a lo que McIntyre siempre respondió: “nadie me ayudó cuando ellos me atacaron a mí”.

Por ende, lo más probable es que el escocés se vuelva villano en las próximas semanas y se una al Judgment Day, mientras que Seth Rollins buscará un nuevo oponente por su presea.

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