Alberto García Aspe fija la mirada como si examinara los recuerdos. En sus remembranzas, encuentra que los clubes nacionales y el Tricolor jugaban en Sudamérica, donde se forjaba el carácter y el brillo destellaba en los rincones más importantes del balompié mundial. Lamenta que eso se haya perdido. Siente que el futbol mexicano hoy, más que evolucionar, “se encuentra estancado”.

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Como futbolista, Beto fue un mediocampista de personalidad, de talento y toque privilegiado de balón. Siempre resultó un elemento imprescindible en las Selecciones Nacionales, sin importar el técnico en turno. Esas virtudes las mantiene intactas al hacer su análisis de lo que le sucede al Tricolor y el torneo local en la actualidad.

“La realidad es que para mí, te digo, en lugar de seguir creciendo, (el futbol mexicano) se ha estancado. Así es como lo veo, y ojalá se pudiera retomar todo esto (competir en tierras sudamericanas)”, considera Alberto García Aspe en entrevista con ESTO. Sus palabras resuenan cuando México tuvo, al quedar fuera en la ronda de grupos de Qatar 2022, su peor participación en una Copa del Mundo desde Argentina 1978.

El ex mediocampista participó en los Mundiales de 1994, 1998 y 2002, así como en la histórica participación del Tricolor en el subcampeonato logrado en la Copa América de 1993. Hoy, ve talento en los futbolistas del país, pero quisiera ver más porque cree que se pueden tener camadas mucho más numerosas de jugadores con potencial de llegar a la Selección Nacional.

“Hay que volver a que México vuelva a seguir produciendo buenos jugadores, que los produce, no te estoy diciendo que no, pero creo que se podrían producir más”, asegura.

LA UNIÓN ENTRE DIRECTIVOS ES VITAL PARA RESCATAR AL FUTBOL MEXICANO: ALBERTO GARCÍA ASPE

¿Qué tendría que suceder para que esto se logre? Alberto García Aspe tiene la respuesta muy clara. La clave está en una mayor comunión de los dueños del futbol mexicano al momento de tomar decisiones trascendentales.

“Si todos los dueños de los equipos estuvieran de la misma unión… Acá lo que sigo viendo es que cada quien ve sus intereses y que, de repente, ahí el poder que maneja el fútbol mexicano son estos (grupos) y estos ya sacaron a estos otros, o sea, es parecido a la política. Van peleando los grupos y unos se quedan con el poder y ellos toman las decisiones, en lugar de que haya un consenso de muchos equipos, que vean por el fútbol mexicano y no solo por sus intereses. Entonces, mientras eso no suceda, yo creo que vamos a seguir de la misma manera”, augura.

Beto, incluso, refiere que es necesario tener una mezcla entre las ganancias económicas y el crecimiento del nivel del futbol mexicano.

“Ya se sabe lo que se tiene qué hacer. Para mí, la fórmula es: Ok, sí, entiendo que el fútbol es un negocio y que tiene que tener fuerte la parte de los económico, eso está clarísimo. Pero también tienen que ver mucho por el aspecto deportivo”, concluye.

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