Cuando parecía que los Celtics veían la eliminación de cerca, apareció Jayson Tatum para evitar que el Heat barriera la final de la Conferencia Este.

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El estelar alero comandó el despertar de Boston en la segunda mitad, para vencer 116-99 a Miami en el Juego 4 disputado en el Kaseya Center. La serie sigue en poder de los pupilos de Erik Spoelstra, pero ahora marcha 3-1.

Durante los primeros dos episodios, se prolongó la historia de los tres compromisos previos. Ni Tatum, ni Jaylen Brown se sintieron cómodos en el costado ofensivo, combinándose para menos de 20 puntos.

Miami se fue al descanso con ventaja de seis (56-50), pero Tatum se lo tomó personal y comandó la remontada. Tomó la responsabilidad y fue calentando la mano, para anotar un total de 33 unidades.
Pero no sólo fue el #0. Todos los titulares de Boston superaron el doble dígito a la ofensiva, aunado al suplente Grant Williams.

Un parcial de 38-23 en el tercer episodio, le dio tranquilidad a la visita, que todavía se dio el lujo de aumentar la diferencia en el último cuarto.

A Miami no le alcanzó con los 29 tantos que registró Jimmy Butler, ahora no aparecieron los actores de reparto. Solamente hubo otros tres elementos de los locales con doble dígito en el ataque.

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Los Celtics lanzaron para un 51% de efectividad con el primer servicio, además de un 40% en triples. De nada les afectó haber cedido en la lucha por los rebotes 39 a 44. Ahora la serie viaja de regreso a Boston para el Juego 5, el cual se disputará la noche del jueves en el TD Garden.

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