Zapopan, Jalisco.- No fue la recepción multitudinaria de otras ocasiones en la perla tapatía para las Águilas del América. Apenas una veintena de seguidores se acercaron al hotel de concentración del conjunto de Coapa para brindarle todo su apoyo a los del “Tano” Ortiz previó a la semifinal de ida ante las Chivas.

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Para algunos, la espera de un par de horas bajo el implacable sol valió la pena, aunque para otros, como es el caso de la jovencita Emily, todo se derrumbó en el momento en que no pudo completar su misión de entregarle a Federico Viñas un globo, una caja de chocolates y una carta que le redactó al atacante argentino.

Tristemente, la tarde no le auguraba buenas noticias a Emily, el inflable reventó, los chocolates con el calor iban perdiendo consistencia, pero eso que más daba, lo importante era darle a “Maraviñas” la carta.
Por fin, el autobús del América apareció en el horizonte, bien custodiado por un par de patrullas.

Uno a uno, los jugadores fueron bajando, hasta que a escena apareció Federico Viñas, sin embargo, el futbolista no alcanzó a escuchar los gritos desenfrenados de Emily e ingresó al hotel. Para suerte de la aficionada, Alejandro Zendejas fue uno de los que accedió a tomarse fotos y repartir autógrafos. Los gritos e incluso el llanto de Emily fueron tan evidente que, Zendejas accedió a tomar los chocolates para dárselos a Viñas.

¿Pero la carta? Pues entre los nervios y lo empujones esta quedó olvidada y Emily no tuvo de otra más que entregársela a un elemento de seguridad del hotel que, de manera no muy convencida, accedió a buscar la forma de hacérsela llegar al jugador.

Viñas, el jugador favorito en el América para Emily

“Viñas es mi jugador favorito, estuve esperando mucho tiempo poderlo ver, quería entregarle esta carta y el señor de seguridad me dijo que se la iba a dar pero no se. Yo solo quería ver a Viñas, lo quiero, lo admiro tanto”, expresó una Emily desconsolada.

Y lejos de esa historia, las Águilas del América tocaron base en tierras jaliscienses. Fue una mañana bastante ajetreada ya que el entrenamiento en la capital del país se dio a temprana hora y luego volaron en chárter desde Toluca. Quizás por el cansancio fue que la mayoría del plantel pasó de largo al momento de bajar del camión. Cabe destacar que debido a la logística, la escuadra accedió a su hotel por una de las puertas traseras.

Mención aparte para Álvaro Fidalgo y Zendejas, los únicos que se acercaron a la gente, al tiempo que el goleador del Clausura 2023, Henry Martin, apenas soltó una sonrisa y un saludo a la distancia. A Fernando Ortiz ni el polvo se le vio, en cuestión de un par de segundos desapareció. Así, los azulcremas se instalaron en Zapopan a espera que la pelota se ponga a rodar este jueves en el Akron.