No fue Caliente, lo que le siguió. La temperatura en el estadio de los Xolos subió lo más que pudo. El resultado fue un juego lleno de goles y gargantas desgañitadas. Toluca se regresó al Estado de México con un punto tras empatar 3-3 en el lugar donde comienza la patria, pero la realidad es que le sabe a derrota. Los Diablos Rojos tuvieron una ventaja de tres goles e increíblemente la perdieron en un tiempo. Los Xoloitzcuintles no ladraron en todo el inicio del juego, pero luego sacaron la rabia. Toluca se confió y de tener el triunfo en la bolsa terminaron con el botín a la mitad.

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Maxi Araujo puso felices a los rojos, el Papo sin ser delantero sumó dos goles más a su cuenta personal, el primero fue una anotación con la cabeza y luego otra con un tiro cruzado. En ese instante hasta se pensó en una goleada de escándalo. Brayan Angulo puso el tercer gol.

Todo lo bueno que mostró Toluca se pulverizó en el segundo tiempo. Miguel Herrera movió sus piezas y le salió. Lucas Rodríguez inició lo impensado con un gol en el área. Los choriceros se durmieron y no despertaron. Fernando Valenzuela puso el segundo tanto con la cabeza y en la recta final del juego Lucas Cavallini tras un mal despeje de Tiago Volpi puso el empate agónico.

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En los minutos restantes los mexiquenses quisieron recomponer el camino, pero fue demasiado tarde. Toluca dejó ir una ventaja de tres goles. Xolos sacó la rabia y recuperó el empate.

Qué empate. Goles a racimos.

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