Si en la mañana hubo apoyo para Chivas, América no iba a quedarse atrás. Las Águilas entrenaron por la tarde y la gente se dio cita en la Universidad donde entrenaron los azulcremas para apoyarlos.

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A la voz de “Jalisco es Azulcrema”, la gente se acomodó en las gradas de la cancha en la que los del Tano Ortiz comenzaron su práctica. Fernando agradeció por unos segundos y continuó con su trabajo.

Poco a poco los plumíferos bajaron del camión y la gente aplaudió por unos segundos. Lejos de cánticos, tambores o trompetas, los aficionados prefirieron observar la práctica. Ángel Malagón, Jonathan Dos Santos y Henry Martín, fueron los más ovacionados, pero, por respeto a las instrucciones del entrenador, sólo saludaron a lo lejos.

El calentamiento comenzó y la gente solamente se limitó a murmurar respecto a los planes del Tano. “Mira, va a jugar Jiménez, no Malagón”, se escuchó entre los presentes.

“Mira, ahí está Henry”, le decía un niño a su padre al ver al actual ídolo americanista. Muchos fueron los que tuvieron la oportunidad de conocer a los jugadores hasta el final de la práctica. Fueron un total de 20 seguidores, todos con su pase azulcrema, los que tuvieron una convivencia de poco más de 15 minutos con algunos jugadores seleccionados, como Alejandro Zendejas, Jonathan Rodríguez y Henry Martín, aunque otros, al final de todo, lograron acercarse para concretar una firma o al menos una selfie, con otros jugadores que se quedaron un rato más.

Con mucha tranquilidad, la gente de América respaldó a sus jugadores, tal vez no fue con cánticos, pero con un cariño sincero que, además de la Ciudad de México, se pudo sentir el cariño de la Perla Tapatía.