Como tantas veces ocurre con otros equipos, el Teatro de los Sueños se convirtió en una pesadilla para el Betis de Andrés Guardado ante el Manchester United. Los españoles compitieron con valentía durante el primer tiempo, sin embargo, todo cambió en el complemento. Los Diablos Rojos impusieron sus condiciones para liquidar el partido, y probablemente la serie, con un contundente 4-1 en la ida de los octavos de final de la Europa League.

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El United goleó en Old Trafford , y pudo hacerlo de forma más estrepitosa de no ser por algunas fallas de sus atacantes. Desde el arranque del partido el equipo inglés dejó claras sus intenciones al hacerse del control del balón y poner el primero apenas al minuto 6, en un fierrazo de Rashford que dejó sin opciones a Claudio Bravo.

El conjunto español acusó el golpe pero supo levantarse para igualar las acciones pasada la media hora de partido. Un potente tiro cruzado por parte de Ayoze Pérez vulneró el lance de De Gea, y es que el balón se coló abajo, pegado al palo, imposible para el ibérico.

En realidad ese fue el único momento en el que el Betis se sintió con opciones. El complemento, sin embargo, reflejó una realidad muy distinta. El Manchester United continuó a lo suyo y el juego de pronto se convirtió en un vendaval, como la nevada que por momentos azotaba el infierno del diablo. Apenas al minuto 52, Antony puso rumbo a lo goleada con un golazo, un disparo de zurda que se coló en el ángulo y dejó al Betis herido de muerte. Seis minutos después, al 58, cayó el tercero, tras un potente cabezazo de Bruno Fernándes.

A pesar de que Manuel Pellegrini buscó retomar el control que había perdido su equipo al darle frescura al mediocampo con el ingreso de Andrés Guardado, no hubo forma de detener al United. El equipo de Ten Hag demostró su gran dinámica y en al menos un par de ocasiones Antony tuvo el cuarto, sin embargo, el brasileño perdonó. La primera fue más clara que la segunda, tras una gran combinación que lo dejó solo de cara al marco, y el atacante mandó el balón por encima cuando por el centro tenía compañeros libres, dispuestos a empujar el esférico.

Fue al minuto 82 cuando el equipo local puso números definitivos, con un remate de Wout Weghorst dentro del área. Aunque aún falta la vuelta en el Benito Villamarín, la sensación es que el Manchester United ha puesto un pie y medio en los cuartos de final, aunque en el futbol nunca se sabe.

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