Ganar la primera carrera de la competencia ya no es algo que los pilotos de la Fórmula 1 anhelen, y es que hay una suerte de maldición que provoca que quien se sube a lo más alto del podio se convierte en el subcampeón de la temporada que está en curso.

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Según las especulaciones que le dieron vida a este tema se dice que a partir del 2017 comenzó todo, cuando Sebastian Vettel era parte de la escudería Ferrari y se coronó en la primera carrera del año. A la postre, estos puntos no le valdrían de nada porque terminó en el segundo lugar del Mundial de pilotos.

Justamente en ese 2017 fue Lewis Hamilton el piloto que acabó como campeón del mundo, además de ser el máximo beneficiado de la maldición, porque en cuatro años consecutivos terminó por ser campeón del mundo.

Para el 2018 quien ganó la primera carrera fue Sebastian Vettel, y en el 2019 fue Valteri Bottas, coequipero de Lewis Hamilton. De hecho, el finlandés se coronó en par de carreras inaugurales consecutivas, siempre teniendo al británico como el campeón mundial al final del año.

Lewis Hamilton se subió al primer lugar en la primera competencia del 2021 y perdió el campeonato del mundo en la última vuelta ante Max Verstappen, un resultado que tuvo polémica incluida.

El año pasado fue Charles Leclerc el que se quedó con los puntos máximos, pero se desinfló a lo largo de la competencia, también víctima de los propios erorres de Ferrari, cediendo el título a Mad Max.

¿Quién será el beneficiado de la maldición?

Aunque todavía falta mucho por correr en esta temporada, los especialistas han asegurado que solamente Checo Pérez puede hacerle frente a Max Verstappen.

Esta estadística pondría al piloto mexicano como el beneficiado directo de la maldición de la primera carrera. Ahora hay que ver si se hace efectiva o Mad Max logra conjurarla.

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