Un año después de toda la polémica que vivió Novak Djokovic, el astro serbio tuvo un regreso triunfal al primer Grand Slam del año, tras derrotar por parciales de 6-3, 6-4 y 6-0 al español Roberto Carballés.

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Djoker pudo volver este año a Melbourne para buscar su décimo título de este certamen, además de estar a la caza de Rafael Nadal para igualar su marca de 22 Grand Slam, máximo ganador de la categoría varonil.

Novak Djokovic estuvo abanderado por un sinfín de lábaros de Serbia, sin embargo, el rival no se conformó con ser un simple invitado a la fiesta de Nole y sorprendió con 0-40 para quiebre con un 2-2 en el marcador.

A pesar de ello, el serbio sacó su calidad con la volea y la derecha, que sumadas a un error no forzado de Carballés solventaron el mal trance. Después de ello endosó desde el resto un juego en blanco al español, situación que ya fue definitiva.

En el segundo set, Carballés mantuvo la intensidad, sin dar una bola por perdida y haciendo correr en varios intercambios al serbio que incluso se tocó el muslo, mismo que terminó vendado por una lesión.

Djokovic lo soportó y ayudado por la red en par de bolas decisivas, consiguió la ruptura en el séptimo juego para quedarse el segundo parcial.

Ya con el partido cuesta abajo y su rival resignado, el serbio se liberó con una exhibición de golpes y subidas a la red para adjudicarse en solo 24 minutos el último set.

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