La calvicie, según un estudio de la Universidad de Pennsylvania publicado en 2016, es sinónimo de masculinidad. En algunas culturas se asocia con la inteligencia; pero en el Puebla de La Franja es símil de éxito.

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Manuel Lapuente, víctima de la alopecia, es el autor material de los únicos dos títulos ligueros del blanquiazul. José Luis Sánchez Solá, otro pelado de época en el banco del cuadro angelopolitano, logró el último ascenso de La Franja a Primera en 2007 y dotó al equipo de identidad; sí, antes de los “Larcaboys” existieron los “Cheliboys”.

Ahora el nuevo inquilino del banquillo de La Franja es otro “pelón”, Eduardo Arce, uno de siete entrenadores estrenándose al frente de un proyecto en el Clausura 2023 de la Liga MX que trata de correr con la misma suerte que sus predecesores, técnicos quienes en su momento no decían mucho, al igual y como él, pero la acabaron rompiendo con el azul y blanco.

Pero Arce, además de compartir calvicie con Lapuente y “Chelís”, recibió como ellos su primer encargo como técnico en la máxima categoría en épocas convulsas del Puebla luego de haber hecho sus “pininos” en las inferiores de La Franja o después de hacerla de apagafuegos. Es decir, de improvisados Lapuente, “Chelís” y el propio Arce poco o nada, aunque esa impresión dio en sus épocas cada uno previo al arranque de sus respectivas competencias.

Lapuente, antes de salir campeón en la campaña 1982-1983, la hizo de interino en dos ocasiones con el Puebla a finales de la década de los 70, inclusive la salvó del descenso. “Chelís”, conduciendo al conjunto blanquiazul a par de Liguillas en su vuelta a Primera División (Clausura y Apertura 2009), llegó a mitad de la primera década del Siglo XXI a Puebla para hacerse cargo de las fuerzas básicas, el resto es la promoción y la salvación del equipo en varios momentos dentro de la máxima categoría.

Manolo, también cogió a un Puebla casi en bancarota tras la devaluación del peso de principios de los 80. El blanquiazul era el principal candidato para descender tras deshacerse de varias de sus estrellas; pero con un equipo repleto de veteranos desdeñados por otros clubes acabó sorprendiendo a todos logrando el primer título de Liga para el club.

“Chelís” se “aventó el paquete” de dirigir a La Franja en 2006 cuando el entonces dueño Francisco Bernat no presumía intenciones de seguir invirtiendo en el equipo. Por entonces nadie conocía a Sánchez Solá, pero un año después era el responsable de devolverlo a la máxima categoría.

A Arce, campeón con la categoría Sub-17 en el Apertura 2020, se le nombró nuevo entrenador tras la abrupta salida de Nicolás Larcamón y luego de las ventas de varias piezas claves en el esquema del equipo durante el mercado de invierno.

¿Cómo terminará la historia de Arce en el Puebla? ¿Volverá La Franja a “sobarle” la calva a otro pelón con el fin de tener suerte para tocar otra vez los cuernos de la luna? Sólo el tiempo lo dirá, pero por ahora el nuevo DT. del blanquiazul recuerda en mucho a la forma en cómo llegaron en su momento Lapuente y “Chelís”, “pelones” que acabaron haciendo historia con el conjunto azul y blanco… ahora el turno en el Puebla le ha llegado a otro calvo.

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