Territorio rojo. Una Perra Brava protege al Nemesio Diez. El grupo de animación más antiguo de los Diablos Rojos le es fiel a su equipo llueva, truene o relampaguee. Ernesto Nuño, integrante de la porra desde hace más de 30 años, reveló a ESTO datos curiosos de la barra. Quitarse las playeras se volvió tradición en una tarde lluviosa en la que los Rojos golearon. El nombre viene de su fundador. La Perra Brava intimida, pero también es noble. La final contra Pachuca la disfrutan como pocos: “La verdad volvemos a vivir este ambiente de final. Rolando, nuestro líder, habla mucho de que esto es generacional, nuestros hijos o nuestros nietos no han tenido la oportunidad de ver coronar a nuestro equipo, nosotros queremos que sea nuestra final, es momento de que volvamos a vibrar”, dijo Ernesto, quien no se resigna, pese al marcador abultado en contra de los escarlatas en la ida.

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El olor a azufre se percibe. La plática es entre fotografías, tambores, recuerdos, todo es rojo. El origen de la porra lo relata Ernesto: “La Perra Brava la funda Rolando González con otros trabajadores que él tenía, eran camioneros, originalmente se reunían en la tribuna de sol, cada 15 días estaban apoyando al Deportivo Toluca, se fue haciendo costumbre hasta que nos fuimos acercando y concentrando un mayor número de aficionados, en ese tiempo, ahí colocaban a la porra visitante, después, poco a poco nos fuimos ganando el espacio, por eso decían que éramos agresivos, pero no, nos fuimos ganando el lugar, la directiva optó por dejar ese espacio para la porra, Rolando era quien tenía el apodo de la Perra, entonces de ahí nació que se le llamara Perra Brava”, relató.

Quitarse las playeras es una de las tradiciones que distinguen a la porra. Nuño estuvo en ese momento: “Eso surge un día que estaba cayendo aguanieve, recuerdo que Rolando dijo que si caía un gol del Toluca se quitaba la playera, si anotaba dos los pantalones, ese día Toluca anotó cuatro goles y de ahí nace la idea de que partido tras partido, llueva, truene, haga calor o frío, todos estamos descamisados”, contó. 

La Banda del Rojo ha ganado protagonismo con sus tifos y cánticos. Ernesto contó que la relación con ellos es buena, incluso guardan sus tambores en la misma oficina: “Afortunadamente con los otros grupos de animación existe buen trato, no porque sean de otra barra diferente a la de nosotros hay pugnas, por el contrario, hay una integración con todas las porras del Deportivo Toluca, eso hace que al interior del estadio todo vibre y se sienta una mejor comunión”, dijo.

Luego de la plática, Ernesto nos mostró la bodega donde guardan los tambores, la fachada de las oficinas. La foto con banderas rojas no faltó.

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PERRA BRAVA, UNA BARRA ALTRUISTA

La Perra Brava es más que una porra. Ernesto contó todo lo que hacen: “Nosotros no solamente somos un grupo de animación, Rolando tuvo el tino de crear con otros integrantes una asociación civil, somos Barra Perra Brava Asociación Civil, realizamos actividades deportivas como carreras anuales, pero también misas, posadas, damos sillas de ruedas, aparatos ortopédicos para las personas que lo necesitan, la gente se acerca a nosotros para solicitar el apoyo, nosotros lo damos, si tenemos la oportunidad de ayudar por ¿qué no hacerlo?”, finalizó.

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