El destino y las casualidades fueron cómplices para que Reyna Isis sea una de las Amazonas estelares en el Consejo Mundial de Lucha Libre.

Un hogar completamente desinteresado en la Lucha Libre fue el escenario donde una pequeña niña con ilusión de convertirse en una cantante famosa se convirtió en la mujer que hoy da vida a la enmascarada Reyna Isis.

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“Mi familia no tenía nada que ver con la lucha libre, ni siquiera son aficionados, era un deporte que no les interesaba”, confiesa en entrevista exclusiva con ESTO.

Aunque sus intenciones eran otras, su destino dio un giro irreversible hacia el deporte espectáculo que hoy ejerce con maestría.

“Yo siempre quise ser cantante, dedicarme a la música, incluso, estuve en una escuela de iniciación artística del INBA (Instituto Nacional de Bellas Artes) pero uno nunca sabe las vueltas que da la vida y aquí terminé (en la lucha)”.

La televisión por cable no era posibilidad en su casa, durante un verano aburrido las únicas opciones eran las películas clásicas o la Lucha Libre, fue ahí donde sintió curiosidad por un programa que ”duraba tres horas donde enmascarados se golpeaban y pensé ‘algo de interesante debe de tener‘”, añadió.

Toda una vida viviendo en el centro de la capital sin ninguna novedad y una tarde los tendederos de los vecinos le causaron intriga, al ver ropa llamativa, colorida y fuera de lo común hizo que pensará en compartir edificio con miembros de un circo.

“Siempre he vivido en el centro de la ciudad de México, una zona concurrida de luchadores, en el departamento de al lado llegaron a vivir luchadores, pero pensé que trabajaban en el circo”.

Con el paso del tiempo descubrió que los aparentes acróbatas realmente eran gladiadores profesionales, que llegaron del interior de la República al corazón del país a competir en las arenas Coliseo y México.

A los 13 años nació el interés real por volverse luchadora de tiempo completo, por lo que aceptó la invitación de sus vecinos a entrenar con ellos, aunque al inicio no era lo que ella esperaba: “Llegué a la fábrica de sueños, pensaba que ya me iba a aventar hacia afuera como lo veía en la televisión y no. Fue muy aburrido, me pusieron a hacer pura condición y maromas”, recuerda Isis.

El miedo y nerviosismo se apoderaron de una Reyna Isis que “era novata, muy flaquita” al momento de un debut contra Amazonas que ya eran estrellas dentro del CMLL, “la lucha libre de mujeres es algo serio, tener que demostrar todo lo que entrenaba con gente ya consagrada como Princesa Sugehit, Silueta, Tiffany”, dijo Isis sobre su primera vez en un cartel profesional.

Ganarse un lugar en un roster tan pequeño como lo es el femenil de la empresa coliseina no es sencillo, con luchadoras de un gran nivel es difícil pero no imposible, “Uno tiene que ganarse su lugar, es complicado”.

Reyna Isis tiene la seguridad del porqué un máscara contra máscara femenil en el 89 Aniversario protagonizado por ella fue posible, un lugar tan especial que se ha sabido ganar a pulso dentro de la empresa más longeva de Lucha Libre, el resultado del esfuerzo y de “la gente que las ha colocado en ese lugar”.

Lo mejor que le ha dado la Lucha Libre en una palabra expresada por ella es “Todo. Mucha gente que ya no está pero que fue maravillosa en mi vida.” Poder ser un ejemplo para la gente que viene atrás de ella es una de las cosas que más la inspiran.

Reyna Isis

Bando: Rudo
Llave: Variante de La Tapatía.
Peso: 64 kgs.
Estatura: 1.60 mts.
Lugar de nacimiento: Ciudad de México.
Profesores: Arkángel, Franco Colombo, Shocker, Virus y Último Guerrero

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