Dicen que no hay mal que dure 100 años. La Fiera presumía una hegemonía sobre Necaxa en el Estadio Victoria con siete triunfos consecutivos, hasta que por fin los Rayos se crecieron al castigo y dejaron totalmente electrocutado a un León que volvió a ser presa fácil. 3-2 en Aguascalientes.

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Al conjunto del portugués Renato Paiva de poco o nada le sirvió tener la pelota durante más de 80 minutos, si a final de cuentas, el que metió primero la redonda a la caja del gol fueron los del “Jimmy” Lozano, quienes al medio tiempo ya lo tenían liquidado.

En su momento, Paiva cambió el sistema, manifestando que el 4-4-2 le iba a causar serios problemas a lo largo de la campaña. Pues el lusitano regresó a lo de antes, a lo que en su momento formó contra Pumas, Monterrey y Mazatlán, y de nueva cuenta le llenaron la canasta en el Apertura 2022. Los verdiblancos regresaron a las andadas con un futbol sumamente predecible, de mucho toque de esférica, pero sin la capacidad de penetrar la zaga rival y sin esa dosis de sapiencia para crear peligro en la cabaña de Malagón.

Necaxa estudió a la perfección las falencias del contrario, cargó por ambos costados a sabiendas de que Castillo y el “Osvi” Rodríguez suele sufrir en la reconversión atrás. Fue precisamente por el lado de Rodríguez donde la localía cascó el primero. Al minuto 33, el lateral leonés le cedió tiempo y espacio suficiente al chileno Araos, quien vino con el centro medido y dentro del área, sin dejarla botar, Milton Giménez inauguró los cartones.

Después de eso, el endeble esquema de Paiva quedó en evidencia, los felinos recibieron una auténtico mazazo del cual jamás se sobrepusieron. Fue la noche de Facundo Batista con doblete, su primero en la Liga MX. A dos minutos del entretiempo, el argentino se animó a disparar desde la larga distancia y venció la estirada de Cota. El futbol, ni la suerte, estaban acompañando a León y para muestra, el tercero de los rojiblancos, otra vez en tiro de Batista que reventó el palo izquierdo, solo que la bola rebotó en la espalda del guardameta panza verde y la pelota entró llorando al arco. El marcador al medio tiempo ya era contundente y una losa pesada, la misma historia que ante la UNAM, Rayados y los cañoneros.

Para el complemento, la tónica no varió tanto, la visita lo propuso y los de casa, ya con la tarea hecha, solo se dedicaron a consumir el reloj.

Moreno, Campbell, Dávila e Ibarra, resultaron ser las apuestas del “domador” para buscar una hazaña como la de la fecha dos frente a Pumas y esta se quedó cerca. Con los movimientos no pasaba nada, hasta que en los instantes finales, Víctor Dávila, un viejo conocido de la casa, recortó distancias de cabeza, y en la siguiente acción, definió con remate cruzado.

León le metió dramatismo en la agonía, pero Necaxa lo calmó justo a tiempo. La Fiera aspiraba a sacar las tres unidades que la catapultaran hasta los puestos de repesca, sin embargo, lo único que obtuvo fue un tropiezo que la vuelve a alejar del objetivo y que sin duda alguna hará renacer las dudas y críticas en torno al proyecto Paiva, mismas que se habían apaciguado en la semana tras la goleada al Atlas.

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