Guillermo Abogado González

Zidane para nada cierra las puertas de dirigir al Paris Saint Germain sabedor de que las opciones de ser técnico de un equipo es complicado, es diferente a su época como jugador cuando tenía más opciones para continuar con su trayectoria, pero por el momento no se ve en el PSG y espera con ansias un llamado para dirigir a la selección francesa con el deseo de tener una revancha personal pues su adiós como jugador del combinado galo no fue el deseado, todo acabó cuando terminó expulsado por el conocido cabezazo al defensa italiano Materazzi.

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“Él (Materazzi) no me habla de mi madre. A menudo ha dicho que no insultó a mi madre. Es cierto. Pero sí insultó a mi hermana, que estaba con mi madre en ese momento. En el campo ya hubo insultos. Todos hablan entre sí, a veces mal, pero tú no haces nada. Ese día, pasó lo que pasó. Él provocó algo al hablar de mi hermana Lila. Fue sólo un segundo y se fue… Pero luego hay que aceptarlo. No estoy orgulloso de ello, pero es parte de mi trayectoria. En ese momento, era más frágil. Es a veces en estos momentos cuando puedes hacer algo que no está bien… Así es como termina. Thierry Gilardi tenía razón en sus comentarios: “Así no…”. Pero eso es todo. Así es. Es difícil. Pero es mi carrera. La historia de mi vida. Como mis dos goles en la final de 1998. Por eso digo que el equipo francés no está acabado. De alguna manera no quiero terminar así. No ha terminado”, indicó Zidane.

Es un hecho muy conocido que el máximo ídolo del exjugador y técnico francés Zinedine Zidane es el exatacante y directivo uruguayo Enzo Francescoli, incluso uno de sus hijos se llama Enzo en su honor, pero a su corta edad, antes de ser profesional, “Zizou” estuvo enamorado de Diego Armando Maradona y de la Copa del Mundo México 1986.

Le impresionó el futbol del “Pelusa” con la Albiceleste hasta que se adjudicó el Mundial en la cancha del estadio Azteca, pero antes a sus escasos 10 años tiene recuerdos importantes de la selección francesa y su participación en la Copa del Mundo España 82. Dos torneos que le marcaron para después luchar por ese sueño de convertirse en jugador profesional hasta que hoy en día el galo es una leyenda.

“Cuando tenía 10 años. Recuerdo aquella semifinal (en el Mundial, contra Alemania Occidental, 3-3, 4-5 en los penaltis). 1984, esa Eurocopa también (ganada por Francia, 2-0 contra España en la final). 1986, México, Maradona, ¡una locura! Cuando tenía 14 años, Maradona me tenía hechizado. Todavía hoy veo partidos de 1986. No sólo las imágenes. Los partidos. Todo el mundo se acuerda de Inglaterra, de sus dos extraordinarios goles (2-1 en cuartos de final), pero también está el Argentina-Bélgica (2-0 en semifinales). Fue magnífico. Es increíble lo que hizo Maradona en el campo”, admitió Zidane.

En entrevista al periódico “L’Équipe” con motivo de sus 50 años de vida, Zidane, campeón del mundo en Francia 98 y subcampeón en Alemania 2006 reiteró que su máximo ídolo fue la figura uruguaya Enzo Francescoli, quien brilló en River Plate y a quien admiró más cuando el charrúa militó en el balompié francés con el Marsella.

“Enzo Francescoli era mi ídolo. Era más que mi ídolo. Yo era un fanático suyo. Era algo más que una mera imitación. Solía analizar todo lo que hacía. Tuve que volver a hacerlo en el campo. He practicado hasta que lo he hecho bien. Observé todo, con una lupa, para reproducirlo. Además, yo iba al estadio en esa época (1989-1990). Estaba en la parte superior del Velódrome, detrás de la portería. Todo lo relacionado con Enzo Francescoli me fascinaba. La técnica con sus contactos de fuera a dentro y de dentro a fuera. Era de encaje. Creo que, en cierto modo, llegué a parecerme a él. Técnicamente, en cualquier caso, Enzo era majestuoso. Dormí con su camiseta tras intercambiármela con él en un Juventus-River de 1996 en Tokio”, mencionó “ZZ”.

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