POR JUAN CASTRO | EL SOL DE ZACATECAS
FOTO: Mexsport

“Si yo no hubiera caído en en mi drogadicción y en el alcoholismo, yo les aseguro que hubiera llegado a ser no el mejor peleador mexicano de todos los tiempos, sino fuera el mejor peleador de toda la historia, porque fácil fácil hubiera llegado a 100 peleas invicto”, señaló el ex boxeador Julio César Chávez González, en charla motivacional en Zacatecas. El tres veces campeón del mundo en distintas divisiones pidió a los padres estar atentos a la conducta de sus hijos y, de vez en cuando, hacerles un examen antidoping.

TE RECOMENDAMOS: Chávez, Canelo, Paez y Márquez, inmortalizados en arte urbano

“No todo en la vida es felicidad, los sueños se cumplen a base de esfuerzo, de dedicación, de perseverancia, pero sobre todo disciplina, todos pueden llegar hasta donde quieran, siempre y cuando se lo propongan, lógicamente va a haber tropiezos, va a haber caídas, como las que yo tuve”, aseveró.

Señaló que “yo tenía el cariño de todo México, y lo sigo teniendo gracias a Dios a donde quiera que voy, pero pasó algo muy triste en mi vida, donde yo, después de la pelea de ‘Macho’ Camacho, a mí siempre me habían ofrecido droga, pero nunca había aceptado y, ese día después de la pelea yo sentí que lo había logrado todo, porque fue increíble el recibimiento que me hicieron, fue una locura”.

“Ahí por primera vez probé la cocaína y fue algo muy triste, muy doloroso, porque pensé que era solamente un pasatiempo, un antojo, lo agarré por pendejo, la verdad, y ahí empezó mi adicción”.
Lógicamente, esto fue en aumento y “seguí ganando peleas porque era un peleador natural, era un peleador bueno, está mal que yo lo diga, pero pues la verdad sí era bueno, porque, a cuántos me chingué”.

Recordó que “empieza mi adicción y yo sentí que la podía controlar al principio, pero después esto fue en aumento, cada día era más, más y más, cada día me preparaba menos, seguía ganando peleas porque era un peleador natural, pero ya los golpes me lastimaban más, ya empezaba a tener problemas personales, hasta que llega esa derrota (contra Frankie Randall)”.

“Hasta que se me viene el mundo encima -prosiguió-, le empecé a faltar al respeto a mi esposa, empecé a convertirme en un ser que no era yo, empecé a tener problemas con la gente que me rodeaba, la gente que más yo quería y que me quería la empecé a hacer un lado, empecé a perder todo, fue algo muy doloroso”.

“HOY NO PUEDO AYUDAR A MIS HIJOS”

“Gracias a Dios pude salir de esa maldita enfermedad, salgo de la clínica de rehabilitación y nadie daba un peso por mí de que yo fuera a recuperarme, y el día de hoy, sólo por hoy, voy a cumplir 13 años limpio, esa ha sido mi mejor pelea, la pelea más difícil”.

“Tengo clínicas en adicciones y no he podido ayudar a mis hijos, no los he podido ayudar, y eso es lo me duele”.

Agregó: “y ahora mi hijo (Julio), yo teniendo clínicas en adicciones, y claro que me duele, pero es lo que él necesita, y es a veces lo que necesitamos para poder entender que tenemos un problema y que solos no podemos, porque siempre creemos que podemos solos y eso es mentira, esto es de prevención y atención”.

“Me duele ver que mi hijo, teniendo un futuro enorme, pudiendo llegar hasta donde él quisiera, fue campeón del mundo, pero desafortunadamente vivió todo lo que yo viví y ni aún así pudo, y ahorita está pasando por momentos muy cabrones, porque está donde yo estuve, y él teniéndolo todo, teniendo unos hijos tan bonitos, y valiéndole madre sus hijos, valiéndole madre su esposa,valiéndole madre su padre, su madre, teniendo su casa en Los Ángeles, su casa en Culiacán, teniéndolo todo en la vida, a veces necesitamos eso, tocar fondo para poder entender y comprender que todos estamos expuestos a caer en esta enfermedad”.

HAGAN EL ANTIDOPING

Julio César Chávez indicó que todos estamos expuestos a las adicciones, sobre todo todos los jóvenes, tienen también que ver mucho los padres los padres de familia, ver a sus hijos, checarlos, cómo se están portando, si llegan tarde, si se les empiezan a perder cosas en sus casas. “Yo les aconsejo de todo corazón que les hagan un antidoping (a los hijos) para ver si andan mal, porque después se vuelven delincuentes, y después, a veces pasan cosas más tristes”, estableció.

Recibe vía WhatsApp todas nuestras noticias deportivas, manda la palabra ALTA en este enlace

?Escucha nuestro podcast?