Rubén Beristáin

Foto: Martín Montiel

¡Hay portero! Sebastián Jurado cambió los abucheos por aplausos y ovaciones en sólo una tarde. El joven guardián mantuvo con vida a Cruz Azul con una gran actuación durante 90 minutos y en la tanda de penaltis le detuvo dos disparos a Formiliano y Palma para que La Máquina avanzara a cuartos de final. Jesús Corona está listo, pero Sebas se ha graduado. Los Rayos quedaron fuera.

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Era matar o morir para los cementeros. El juego arrancó con un gran ritmo. Los Rayos avisaron primero, no tardaron mucho en darse cuenta que su rival les había cedido la iniciativa, por eso quisieron aprovechar. Milton Giménez se plantó en el área, pero no estuvo fino. Rodrigo Aguirre no tuvo opciones claras. Fue Dieter Villalpando el más cercano con un remate de palomita, pero exactamente a la posición del guardián Sebastián Jurado. Los de Aguascalientes perdonaron.

A La Máquina le costó mucho trabajo crear peligro. Le faltó ese hombre distinto con creatividad. Ángel Romero comenzó en la banca, mientras que Charly Rodríguez todavía no pudo estar. Iván Morales quiso ser determinante y sacó un disparo inesperado. El balón bajó para ingresar a la red, pero Malagón voló para salvar su meta.

Juan Escobar tuvo una opción casi de inmediato. El lateral y goleador del equipo se encontró con un balón, tuvo tiempo y espacio, sólo que decidió mal.

En ese momento, Cruz Azul reaccionó y fue mejor, sin embargo, fue limitado al frente. Tabó, Antuna y el propio Morales estuvieron lejos de inquietar al portero necaxista. Del otro lado, si los hidrocálidos tuvieron algunas opciones fue gracias a lo errático que estuvo Alejandro Mayorga. El lateral no dio una y perdió más de diez balones, aunque para su fortuna, ninguna tuvo que sacar de su arco. El primer tiempo culminó y la afición recriminó con un sonoro abucheo.

El complemento cambió. Los celestes se fueron al frente y tuvieron su recompensa. Tabó se quitó a varios de encima, centró y Escobar definió como delantero. Morales tuvo el segundo, pero sólo cimbró el poste.

Necaxa se fue encima, pudo conseguir la paridad, pero se encontró con la figura de Jurado. El joven lo detuvo todo y hasta contó con suerte con un remate al travesaño.

Todo parecía un triunfo cementero, pero la postura de cuidar su gol le salió caro. Aguirre empató, el árbitro lo anuló por una supuesta falta, pero el VAR lo hizo válido. El cierre fue cardíaco, todo se definió en penaltis. Jurado una vez más fue el héroe, detuvo dos penaltis y Cruz Azul está en cuartos de final.

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