RUBÉN BERISTÁIN

Foto: Ramón Romero

A Cruz Azul le llueve sobre mojado. En el estadio Azteca no da una y el desastre ocurrió en un clima que reflejó el sentimiento de su afición. La Máquina necesitaba sólo una victoria para quedar tercero en la clasificación, pero falló a la hora buena, el gol no apareció y descarriló ante el Atlético de San Luis, que asegura repechaje. Los celestes quedaron sextos, ya no dependen de si mismos para un boleto directo a Liguilla y lo peor es que ahora enfrentarán a un América que sigue a la alza. 0-1 final.

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Los cementeros comenzaron con la presión máxima en su contra. Las victorias de América y Atlas lo bajaron al sexto lugar del torneo, de esa forma empezó su juego en casa. Esa fue la razón por la que no dejó pasar el tiempo y atacó de inmediato, aunque lo hizo sin un centro delantero nominal. Juan Reynoso una vez más optó por un ataque conformado por Romero, Antuna y Tabó, los cuales quisieron juntarse, generar peligro, pero pocas veces pudieron hacerlo. Con poca profundidad y nulas variantes fue como pasó el tiempo sin una generación clara de peligro.

Fue entonces cuando la visita quiso dar la sorpresa. Sin nada que perder y mucho que ganar, trató de complicarle a su rival. San Luis se paró bien en el Coloso de Santa Úrsula, de forma ordenada y sin dejarle espacio a los celestes. Rubens Sambueza volvió a su antigua casa y se vio cómodo a pesar de su veteranía. Berterame, quien suena para llegar a La Máquina en el próximo torneo, quiso hacer algo más, pero Jurado tampoco sufrió tantos embates.

El trámite fue muy parejo. Tabó quiso explotar y mostrar su versión poblana. Fue el único que disparó a puerta, lo intentó de media vuelta, pero el portero Marcelo Barovero detuvo. El trapito no tuvo ningún problema.El juego parecía irse al descanso con una igualada con pocas emociones, pero los potosinos tuvieron algo preparado. Murillo mandó un balón al área, con un sólo toque se libró de la zaga azul. Chávez entró entre tres defensas. Mayorga y Aldrete no se enteraron y el Puma sólo venció a Jurado para marcar su primer tanto en el máximo circuito.

La Máquina comenzó el complemento a contracorriente. Santiago Giménez ingresó para darle más poder al ataque. El equipo cementero estuvo encima, metió a los rojiblancos en su área, buscó y lo intentó por todos lados, pero fueron incapaces de mover las redes. Santi no tuvo una clara, a Tabó se le vio desesperado e Ivan Morales tampoco fue solución. Barovero no la pasó mal, ni siquiera fue el héroe. Jurado si lo fue y le dio vida a los suyos con una atajadas magistral cuando Waller ya pensaba en festejar.

La Máquina quedó descarrilada, sufrió un tormento en el Azteca y puso en duda su boleto directo, mientras que San Luis sueña con repechaje.

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