GUILLERMO ABOGADO GONZÁLEZ

Foto: José Luis Melgarejo | Mexsport

La escuadra de Cruz Azul evitó desgracias, sacó la cara por el balompié mexicano y se instaló en las semifinales de la Liga de Campeones de la Concacaf al igualar 1-1 en el partido de vuelta de los cuartos de final frente al Montreal para el 2-1 global favorable a los celestes.

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Carlos Uriel Antuna fue el jugador decisivo de La Máquina ahora en territorio canadiense, tal y como sucedió en la ida en el estadio Azteca cuando anotó el tanto del triunfo que este día hizo la diferencia frente a los canadienses, que no pudieron eliminar a otro club mexicano en esta edición del certamen.

Como era de esperarse, la escuadra de la MLS salió con mayor intención a la ofensiva pero la claridad la dejó en el vestuario, situación por la que no provocó peligro en la primera mitad de la meta defendida por Sebastián Jurado, mientras que La Máquina de a poco se metió en el encuentro y comenzó a tejer jugadas sobre el arco de Sebastián Breza con un tridente totalmente diferente al que encaró a Pumas de la UNAM. Antuna, Santi Giménez y Ángel Romero se encargaron del ataque cruzazulino.

Precisamente Antuna dejó escapar la primera oportunidad clara de gol para la visita, aunado también a la buena atajada con el pie por parte de Breza, para mantener la igualada a cero, pero el empate se rompió antes del descanso con un golazo de Carlos Uriel para poner el 2-0 lapidario para el club canadiense, que tenía que ir por tres tantos para sobrevivir.

En el complemento, el técnico local Wilfried Nancy ingresó a Kei Kamara y en los primeros 10 minutos hizo más que todos sus compañeros con dos llegadas de peligro sobre la portería de Jurado pero sin la suerte para empatar ante un Cruz Azul al que no le interesó tener el balón en el segundo lapso y se preocupó más por el orden defensivo y por evitar el fantasma de la cruzazuleada.

El estratega de la Máquina, Juan Reynoso, antes de la hora de juego decidió apostar por otro defensor, entró el “Shaggy” Martínez, para impedir y frenar cualquier intento de ataque del Montreal. Un mensaje muy claro para lo que restaba del encuentro, un cuadro canadiense con el afán de ser incisivo y un Cruz Azul cauteloso, prevenido y con su apuesta al contraataque por lo que el DT peruano también refrescó la ofensiva con las entradas del novel Rodrigo Huescas y del chileno Iván Morales.

Si bien la posición del esférico quedó del lado del local, Montreal no fue ni la sombra de lo que mostró en la instancia pasada ante Santos Laguna al que borró del campo, sin embargo le alcanzó para empatar el cotejo gracias a una jugada a balón parado y al error de Jurado, quien salió mal a cortar un centro y el francés Rudy Camacho con la testa guardó el balón al fondo de las redes.

La igualada no cambió el guion. Cruz Azul siguió con su intención de ser ordenado atrás, pero sin dejar de lado el nerviosismo que, por historia, siempre aparece en los minutos finales de los partidos de La Máquina ante un impetuoso Montreal pero al que le faltó luminosidad a la hora de atacar. Cruz Azul ahora deberá esperar por Pumas o New England en semifinales para dar un paso más rumbo al título de esta Concachampions y soñar con su segunda participación en el Mundial de Clubes.

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