Con la tecnología de Google Traductor

PARÍS 2024

8, marzo 2022 - 19:26

┃ José Ángel Rueda

Liceaga

JOSÉ ÁNGEL RUEDA

Foto: @GerardoLiceaga

Como si fuera un carrusel, la violencia aparece de manera cíclica en el futbol mexicano. Aunque nunca con la crudeza que se vio en La Corregidora el sábado pasado, las barras a menudo protagonizan esta clase de trifulcas dentro y fuera de los estadios. Acompañando del relato del enfrentamiento, siempre van las medidas que se tomarán para erradicar estos comportamientos, pero nunca pasa nada.

Tal vez te interese: Así fracasó la credencializacion de las barras en el pasado

Hace casi una década, en el 2013, el entonces diputado Gerardo Liceaga se acercó con los clubes para contener a los denominados grupos de animación; la idea era evitar algo como lo que ocurrió en Querétaro. Las propuestas de la Cámara, sin embargo, no encontraron la respuesta esperada y la bola de nieve siguió creciendo.

“Hoy estoy otra vez impactado, si el tema de la violencia verdaderamente absurda y terrible que vi en las imágenes del sábado me dejaron horrorizado hoy la Federación Mexicana de Futbol ha dejado ir la mejor oportunidad de meter en cintura a las barras, porque las barras van a seguir, y porque la barra más peligrosa es aquella que comete un delito tan grave como la del Querétaro y solamente la castigas tres años, pero no la disuelves, no la desapareces, no la prohíbes. No nada más el sábado, hoy es el día más negro en la historia de la justicia en el futbol mexicano”, señaló Liceaga, en entrevista con el ESTO.

Las sanciones impuestas por la Federación Mexicana de Futbol (FMF), en conjunto con los protocolos para evitar que algo así vuelva a ocurrir, son insuficientes.

“Si después de todo el horror que vimos, las golpizas inmisericordes, desnudar a los chavos, pegarle a las mujeres, empujar a los niños, si eso no fue suficiente como para perseguirla legalmente, hoy nuevamente Yon de Luisa es Yon de Luisa, de Mikel Arriola no te digo, porque acaba de llegar, y él llegó con muchas ganas de poner orden y de hacer muchas cosas, pero se topó con el monstruo que es el futbol mexicano, y con todas las componendas e intereses que hay detrás de los clubes y de los grupos de animación”.

Liceaga recordó como fue aquella reunión en la que la Comisión del Deporte de la Cámara de Diputados planteó ante los dueños una serie de medidas para tener el control sobre las barras. La propuesta, curiosamente, es la misma que se anunció este martes en voz de los directivos del futbol mexicano, sólo que ocho años después. Entre las acciones recomendadas estaba la credencialización de cada uno de los integrantes de la barra, con nombre, domicilio y fecha de afiliación, además de la implementación de cámaras de reconocimiento facial y arcos detectores de metal en las entradas. A pesar de que el protocolo contaba con el apoyo de Decio de María, entonces presidente de la FMF, encontró la férrea oposición de los dueños de los equipos.

“Todos, salvo los equipos de Monterrey, cuestionaron el tema económico, entre ellos Yon de Luisa, presidente del América, que hoy es el presidente de la Federación Mexicana de Futbol y que hoy propone como medida nueva la credencialización fue uno de los que se opuso a la credencialización hace ocho años cuando nosotros se lo sugerimos. El tema fue el pago, ¿quién iba a pagar la credencial?”, dijo Liceaga.

Que Yon de Luisa no se cuelgue una medalla que no le corresponde, se la tuvo que haber colgado hace ocho años, que se lo propusimos. Él hubiera tomado el liderazgo como presidente del América, hubiera jalado a todos, a Tigres y Monterrey, que nos sentíamos apoyados por ellos, porque le veían un beneficio a lo que estábamos haciendo, otro gallo estaría cantando, porque esta tragedia se pudo evitar”, finalizó.

La ley tiene que aplicarse, asegura Gerardo Liceaga

Fue en el 2014 cuando el pleno de la Cámara de Diputados aprobó la Ley General de Cultura Física y Deporte. La idea fue abordar hasta el mínimo detalle en cuanto a la legislación deportiva, entre ellos la violencia en los estadios. Gerardo Liceaga, entonces secretario de la Comisión del Deporte, recuerda el trabajo que hay detrás de una ley que debería cumplirse a rajatabla.
“La ley está ahí, nos tardamos más de un año en lograrla, participaron doctores en derecho juristas, procuradores de justicia, sociólogos, psicólogos deportivos, psicólogos, hubo mucha gente involucrada, no es una ley hecha al vapor, el apoyo a los jóvenes, el acceso al deporte, se hizo un estudio perfecto, y al final el tema de la violencia en los eventos deportivos. Al final es eso, puede ser la mejor ley del mundo, pero si tú no la aplicas con todo el rigor con el que fue realizada es letra muerta”, señaló en plática con el Diario de los Deportistas.
Liceaga consideró correcto el manejo que el gobierno de Querétaro le dio al tema jurídico de los involucrados, quienes enfrentarían penas mucho más elevadas a las que se dictaban hace apenas unos años. “Lo que hizo el gobernador de Querétaro es oportuno. El delito en sí ya es grave, tentativa de homicidio, pero si a eso tú le agregas los apartados de la Ley General de Cultura Física y Deporte del Artículo 153, entonces ya no salen, o sus fianzas que antes pagaban 500 o 1000 pesitos, dependiendo el golpe, serán mucho más altas. Todo esto ha sido una batalla”, finalizó. / JOSÉ ÁNGEL RUEDA

?Escucha nuestro podcast?