PACO G. VILCHIS

FOTO:  | MEXSPORT

El Chelsea de Inglaterra, campeón de Europa, cumplió con el pronóstico en el Mundial de Clubes y, aunque de manera justa, pudo doblegar en la semifinal por la mínima diferencia al Al Hilal de Arabia Saudita, para así, como estaba pronosticado, jugar la gran final el próximo sábado, donde enfrentará al complicado Palmeiras de Brasil.

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Esta será la segunda ocasión que el equipo londinense de proclamarse campeón del mundo, después del fallido de hace diez años, cuando fue superado por el Corinthians, siendo la única vez que los campeones europeos no ha logrado levantar el título, en las últimas 14 ediciones.

Al cuadro londinense solo le bastó con aprovechar los errores del cuadro saudí. El gol llegó de un centro desde la izquierda de Kai Havertz al punto de penalti fue mal despejado por Yasir Al Shahrani, quien dejó la pelota en los pies de Romelu Lukaku, solo ante el portero y que no tuvo dificultad alguna para meter esa pelota la fondo de la red.

El conjunto dirigido por Thomas Tuchel, dejó que el equipo Al Hilal tuviera más tiempo a posición del balón, que no lograron peligro en la zona de los europeos.

Para la segunda parte, los campeones asiáticos salieron con toda la intención de buscaban la zona peligrosa que no inquietó al Chelsea. La única opción buena del Al Hilal fue por conducto de Matheus Pereira, quien remató en buena posición, pero su tiro se fue desviado.

La victoria del Chelsea no peligró y cerró el compromiso con una esperada victoria para cumplir y situarse en la final por el título

Los Blues buscará el título ante el Palmeiras brasileño en la final del sábado, que alcanzó con menos solvencia de la esperada frente un rival inferior que no se dio por vencido hasta el final.

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