José Ángel Rueda

FOTO: AFP

Considerados como dos de las mentes ofensivas más brillante de la NFL, Kyle Shanahan y Sean McVay están listos para escribir un capítulo más en su rivalidad. Desde su irrupción como entrenadores en jefe, en el 2017, ambos han sido capaces de imponer un estilo que tiene una base en común y que este domingo una vez más pondrán a prueba en la final de la Conferencia Nacional.

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SUS INICIOS

La historia en común de los coaches no sólo se ha escrito desde que tomaron las riendas de los 49ers y los Rams, en la temporada 2017, sino que comienza desde los tiempos en los que ambos eran parte del staff de Mike Shanahan (padre de Kyle), en los Washington Redskins, a principios de la década pasada.

Pese a que por aquel entonces Kyle Shanahan apenas tenía 31 años y Sean McVay 24, ambos eran considerados como unos jóvenes prodigiosos. Algo había en su forma de ser que cautivaba y que les permitía mostrar su autoridad más allá de que algunos jugadores eran mayores que ellos.

Kyle Shanahan, quien creció aprendiendo el arte de los banquillos al mirar a su padre, era el coordinador ofensivo. Antes ya había tenido alguna experiencia con los Buccaneers de John Gruden y los Texans de Gary Kubiak, sin embargo, fue hasta la temporada 2010, con los Redskins, que pudo establecerse. En la capital norteamericana estuvo cuatro años, y a pesar de que sus números no fueron del todo favorables, en la temporada 2012 fue capaz de meter a su ofensiva en el top 5, con un Robert Griffn III en gran nivel. Aquel ataque es recordado por su capacidad de correr el ovoide, con Alfred Morris como motor.

A la par del desarrollo de Shanahan, un joven llamado Sean McVay ya destacaba en el staff de coacheo. Desde su posición de entrenador de alas cerradas, era capaz de influir de manera activa en la ofensiva. Su carácter lo convirtió en el sucesor natural de Kyle Shanahan, quien salió del equipo en el 2014 y puso rumbo a Cleveland para luego recalar en los Falcons, también como coordinador defensivo, hasta finalmente recibir la oportunidad como entrenador en jefe de los 49ers.

Bajo el mando de Sean McVay la ofensiva de los Redskins tuvo una mejora progresiva. Con Kirk Cousins como mariscal de campo, el enfoque cambió. En su tercera y última temporada como coordinador ofensivo, el ataque de Washington finalizó como el segundo mejor de la NFL, esas credenciales le permitieron tomar las riendas de los Rams apenas a los 31 años.

LA RIVALIDAD

Kyle Shanahan y Sean McVay llegaron a 49ers y Rams en el 2017. El hecho de recalar en la misma división y el conocimiento previo pronto alimentaron su rivalidad. Su historia ha sido similar. El entrenador en jefe de Los Ángeles logró meter a su equipo al Super Bowl en su segunda campaña, sin embargo, cayó en el juego grande ante los Patriots. Shanahan, por su parte lo hizo en su tercera campaña, pero tampoco pudo ganar el Vince Lombardi al perder con los Chiefs. Este domingo, sólo uno podrá tener la oportunidad de meterse a un nuevo Super Bowl.

Los partidos entre ambos dan cuenta de una clara ventaja para Shanahan, quien ha ganado siete de sus 10 enfrentamientos. Aún así, el de este domingo será el más importante de todos.

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