Marco Montoya

Foto: ANDREJ ISAKOVIC | AFP

El campeonato más dramático de la historia se definió en la última vuelta, Max Verstappen consiguió su primer título en la Fórmula 1 en un final que quedará en los libros de historia como el más emocionante de la categoría reina.

El neerlandés parecía tenerlo todo perdido, estaba a 11 segundos de Lewis Hamilton hasta que apareció un Safety Car a falta de cinco vueltas. El Gran Premio de Abu Dabi se reanudó con un giro y el miembro de Red Bull lo dejó todo sobre la pista, rebasó al británico y se quedó con la gloria.

Sergio Pérez debió retirarse por un problema con el auto, pero su defensa ante ‘Sir Lewis’ a la mitad de la carrera quedará para la posteridad, él regresó a la contienda a su compañero.

LA CARRERA

Hamilton se mostró incontenible desde el comienzo, en cuestión de metros le arrebató la pole position a Verstappen, en la primera curva ya estaba bajo control.

El neerlandés trató de responder instantes más tarde, sin embargo, en un giro dejó sin pista a su rival y sólo le quedó aceptar el segundo lugar.

La unidad de potencia del Mercedes comenzó a ejercer su dominio en la pista, mientras que las gomas de Red Bull perdieron rendimiento en poco tiempo. En cuanto se abrió la ventana de pits, Max acudió por un cambio, Lewis respondió de la misma manera en la siguiente vuelta.

Las detenciones en boxes de los líderes del campeonato dejaron a Checo como puntero, la estrategia del toro rojo fue predecible, el piloto tapatío debía de aguantar al británico para que ‘Mad Max’ pudiera acercarse.

Pérez regaló uno de las mejores defensas de la temporada, durante dos vueltas, con ruedas desgastadas, resistió el embate del bólido teutón y al mismo tiempo le permitió a su compañero acercarse.

Cuando comenzó su batalla había seis segundos de diferencia, el mexicano logró recortar la brecha a uno, el resto dependía de Verstappen, este último reconoció al jalisciense: “Checo es una leyenda”, expresó por radio.

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A pesar de la demora, Hamilton volvió a escaparse una vez que el RB16B se hizo a un lado para que volviera la contienda entre los líderes. Parecía que el resto era cuestión de trámite hasta que apareció un Virtual Safety Car.

Red Bull debía arriesgar y mandó a Max por otro juego de neumáticos, mientras que Mercedes decidió jugársela con las mismas ruedas. Nuevamente no había una diferencia radical.

Nicholas Latifi se estrelló contra el muro y, a falta de cinco vueltas, entró el Safety Car, comenzó el drama. Una vez más Verstappen recibió nuevas ruedas, las más blandas de la gama.

El temor a perder la punta llevó a que Hamilton decidiera quedarse sobre la pista. Con una vuelta por correr, la frescura en el monoplaza del neerlandés le permitió superarlo en la quinta curva, el Red Bull cerró como un león y se quedó el título.

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