Marco Montoya

Foto: Especial

Cuando Sergio Pérez llegó a Red Bull para esta temporada se tenía en consideración que su rival directo fuera Valtteri Bottas, sin embargo, el mexicano ha presentado más roces con Charles Leclerc sobre la pista. El caso más reciente se dio en el Gran Premio de Arabia Saudita, cuando un toque acabó la carrera de Checo, ese incidente no fue el primero que protagonizan en el año.

Encuentros sobre los circuitos con el miembro de Ferrari le han costado al tapatío el abandono en Yeda, un podio en Italia, 10 segundos de sanciones en Austria y puntos en el campeonato de pilotos. A falta del GP de Abu Dabi, ya no importa dónde quede, permanecerá inamovible del cuarto lugar.

Los enfrentamientos en los asfaltos comenzaron en el Red Bull Ring, Leclerc trató de superar a Pérez, pero el monoplaza del jalisciense le cerró el pasó y lo mandó en dos ocasiones a la grava, lo que derivó en que los comisarios le impusieran un par de sanciones de cinco segundos.

Charles explotó por la radio del equipo, mientras que Checo reconoció sus errores y terminó por disculparse al término de la sesión. “Con Charles lo siento mucho porque no es la forma en que me gusta correr. No soy ese tipo de piloto que corre de esa manera”, declaró.

A partir de allí comenzaron semanas difíciles para el miembro del toro rojo, ya que no pudo sumar en las siguientes tres carreras, justo cuando aún se desconocía si permanecería en el equipo para 2022.

Un par de meses después, en Monza, el mexicano lucía encaminado a volver al podio. En la catedral de la velocidad arrancó noveno, pero su destreza junto con el retiro de Max Verstappen y Lewis Hamilton le abrieron el camino.

Con mejor ritmo, Pérez trató de adelantar a Leclerc, sin embargo, lo hizo saliéndose del circuito, la acción provocó que preguntara si debía devolver la posición, en su equipo le dijeron que no, minutos más tarde, apareció una penalidad de cinco segundos.

Checo llegó tercero, pero esos segundos lo mandaron hasta el quinto lugar. Red Bull alegó que lo habían dejado sin espacio, su queja de nada sirvió. Charles dijo que sí le había dejado un lugar para que lo pasara.

El gran nivel del tapatío en las jornadas recientes llevó a que evitara cruzarse en el asfalto con el monagesco, su preocupación finalmente pasó a ser Mercedes hasta Arabia Saudita.

Sergio se despidió de cualquier opción de alcanzar a Bottas en el tercer lugar entre los pilotos, mientras que Red Bull se rezagó a 28 unidades de los constructores cuando en el relanzamiento en Yeda, un toque sobre el neumático trasero derecho del RB16B causó que trompeara y se estrellara en el muro.

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Leclerc pudo continuar. A pesar de que ni siquiera logró terminar, Pérez eximió de culpa al piloto que acabó de manera prematura su actuación. “Charles no tenía mucho a dónde ir. Una pena lo que sucedió”, manifestó.

El incidente en Arabia Saudita fue el más doloroso para el jalisciense y la escudería austríaca, ya que el campeonato de constructores podría habérseles escapado.

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Sergio Pérez llegó al equipo de la bebida energética con las intenciones de batirse con Mercedes, pero el Ferrari de Charles Leclerc le ha sacado por lo menos más de un punto en el campeonato.

COMENZÓ EN SAKHIR

En la primera victoria de Sergio Pérez también estuvo involucrado Charles Leclerc. En la largada, el monagesco golpeó el monoplaza del mexicano y causó que trompeara. Checo cayó hasta el fondo, pero logró recuperarse para conseguir el triunfo en Sakhir.

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