Marco Montoya

Foto: Rob Carr | AFP

Para mantener bajo control al explosivo ataque de Tom Brady el mejor método es mantenerlo en la banca, Washington tuvo el balón por casi 40 minutos y derrotó 29-19 a Tampa Bay en un resultado rompe quinielas.

Taylor Heinicke continúa elevando sus bonos para que el Football Team lo vea como su quarterback del futuro, cuando parecía que los Buccaneers estaban de regreso, comandó una serie de 19 jugadas y 10 minutos que culminó con un touchdown de Antonio Gibson.

‘TB12’ recibió de regreso el balón con 29 segundos, sin tiempos fuera y la obligación de timbrar dos veces, solamente le quedó tirar la toalla.

Los Bucs no pudieron reponerse al inicio complicado de su pasador, Brady lanzó dos intercepciones en el primer cuarto. El conjunto capitalino capitalizó, llegó a tener ventaja de 16-3.

Un balón suelto de Washington revivió a Tampa Bay, Mike Evans tuvo una recepción de 40 yardas que despertó al campeón, pero su defensa fue incapaz de contener a Heinicke.

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En cuanto al tiempo de posición, los locales tuvieron el ovoide 39:08 minutos, mientras que los Buccaneers apenas 20:52.

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Si bien la derrota no afecta su liderato divisional, complica su posición en la conferencia ante el gran momento que viven equipos como Cardenales, Vaqueros y Empacadores.

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