ESTO EN LÍNEA

FOTO: ÉRIK ESTRELLA

La derrota no es sencilla, en muchas ocasiones los jugadores que pierden una final se quitan la medalla de inmediato, pero no fue el caso de los americanistas en la cancha del BBVA, a pesar de caer uno por cero, todos mantuvieron el temple e incluso permanecieron en la cancha para aplaudir al campeón Monterrey. Aunque no era el plan de muchos, Santiago Solari regresó a aquellos que querían ir al vestidor de inmediato.

El argentino mostró una vez más la clase que lo caracteriza y una vez que recibieron la presea del segundo lugar, algunos jugadores salieron enseguida al vestidor, peor no contaban con que Solari les iba a pedir que permanecieran, pues para el estratega americanista las educación y el respeto al rival es una de sus bases para dirigir al plantel.

“En el deporte profesional siempre hay el mayor respeto, el temor no existe, hay respeto y alegría. En ese sentido tenemos respeto al rival, no sé si valga la pena recordarlo, pero llegar a la final es un éxito de un proceso”, dijo Solari en la conferencia previa.

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Incluso Memo Ochoa, capitán del equipo, también se encargó de reunir a sus compañeros a pesar del trago amargo que vivían por perder la oportunidad de asistir al Mundial de Clubes, luego de que Funes Mori marcó el único tanto del encuentro.

Con la victoria Monterrey consiguió su quinta Copa de Campeones de la Concacaf por lo que sumará la misma cantidad de apariciones en el Mundial de Clubes, una vez más con la esperanza de regresar con la mejor actuación del futbol mexicano en dicha competencia.

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