Con la tecnología de Google Traductor

Mira

23, septiembre 2021 - 8:04

┃ Miguel Ángel Mujica

José Antonio Roca

MIGUEL ÁNGEL MÚJICA

Una de las goleadas más dolorosas en la historia del Guadalajara fue en el estadio Azteca. No tenía mucho que el Campeonísimo había dominado la Liga MX, cinco años para ser precisos, y el Guadalajara quería volver a construir su legado.

TE RECOMENDAMOS: Recuerdos del Clásico Nacional: Espectacular 3-3 en el Azteca

El América llegó al choque, el 4 de febrero de 1971, con el antichiva más grande en el banquillo. José Antonio Roca fue designado como el entrenador por Guillermo Cañedo de la Bárcena, en búsqueda de identidad. El técnico no falló y fue previo al encuentro contra el Rebaño que lanzó una de sus míticas frases en contra del Guadalajara. “Los enanos nunca crecen”, refiriéndose al ya popular equipo tapatío.

En la cancha, los rojiblancos se fueron al frente en el marcador gracias a Salvador Espinoza, en un encuentro que parecía que el Guadalajara se llevaría sin problemas. 

Los cremas reaccionaron de inmediato y comenzaron una de las mayores goleadas americanistas a su máximo rival. Toninho, Roberto Rodríguez, Carlos Reinoso, Juan Manuel Borbolla y el mítico Enrique Borja, dieron una voltereta impresionante en el marcador. 

Recibe vía WhatsApp todas nuestras noticias, manda la palabra ALTA en este enlace

Chivas reaccionó al final con una diana más, pero de poco serviría, el resultado estaba forjado y una de las mayores alegrías en la carrera de Roca en el banquillo americanista se forjó aquella tarde en el estadio Azteca.

TAMBIÉN PUEDES LEER: Recuerdos del Clásico Nacional: Chivas apagó a ‘chicotazos’ el Azteca

Ese triunfo impulsó a las Águilas, con históricos como el Campeón Hernández o el Pichojos Pérez en la zaga, Toninho y el Maestro Reinoso en el medio campo y Borja como el referente para levantar la que sería la segunda Liga de los amarillos y forjar, poco a poco, lo que hoy se conoce como el juego de juegos, el Clásico Nacional.

?Escucha nuestro podcast?