6, agosto 2021 - 6:02
Hugues-Fabrice Zango
Miguel Enríquez
FOTO: ALEKSANDRA SZMIGIEL | REUTERS
Los Juegos Olímpicos cuentan grandes historias que cruzan al deporte con la sociedad. En el anecdotario de las justas veraniegas habrá que sumar una nueva página del medallero de Tokio 2020, la que escribe Burkina Faso.
La nación de África Occidental ha participado en 13 ediciones de los Juegos Olímpicos y nunca había ganado una sola medalla de ningún color hasta el pasado 5 de agosto, cuando se sumó el primer bronce para los de la bandera verdiroja.
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La anécdota la cuentan desde las pistas de atletismo de Tokio 2020. En la modalidad de triple salto masculino, Hugues-Fabrice Zango logró subir al podio al lado de Pedro Pichardo (oro) y Zhu Yaming (plata), logrando una distancia de 17.47 metros.
Great achievement This medal is for my country
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Burkina Faso se encontraba como uno de los 71 países que nunca había saboreado la gloria de un podio olímpico. Para sumarle méritos al metal, este se cosecha cuando se celebraba un año más del cambio de nombre de la nación.
El 4 de agosto de 1984, Tomás Sakara, líder de la revolución social del entonces llamado Alto Volta, promulgó el cambio de nombre de la región por el hoy conocido como Burkina Faso, que significa patria de hombres íntegros, añadiendo a las modificaciones una nueva bandera que tenía en sus genes la diversidad que habita en su territorio, históricamente dominado por Francia.
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Sakara es reconocido por despegar el golpe de estado que le daría independencia a su país y por desarrollar el programa social más grande en la historia del continente ‘negro’. Se trataba de aportar a la educación, cuando 90% del país era analfabeta, y de dignificar el papel de la mujer en el esquema burkinés.
Burkina Faso rejoiced as triple jumper Hugues Fabrice Zango delivered the country’s first ever Olympic medal https://t.co/IDJKxqC3eJ pic.twitter.com/VAQy6TZpWl
— Reuters (@Reuters) August 6, 2021
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Desde que el Comité Olímpico Internacional admitió a Burkina Faso en las organizaciones de los Juegos, han pasado 49 años y, exactamente 37 años después de la revolución, el país de África Occidental da un ‘salto’ para, desde las piernas de Hugues-Fabrice Zango, hacer honores al trabajo de una nación que ahora también encuentra la inclusión en los libros de la máxima fiesta deportiva.
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