22, mayo 2021 - 7:51
Pumas-campeon-2011
Brian Sales
Foto: Mexsport
Pumas es uno de los cuatro grandes, pero acaba de consumar una década sin títulos para la vitrina. La última vez que se proclamaron campeones, Jorge Borja Navarrete era presidente del patronato, Guillermo Vázquez era el estratega, Leandro Augusto aún jugaba, y ya llovió demasiado desde ese entonces. Recientemente, los auriazules perdieron su segunda final consecutiva de la década ante el León, pero lo que más alarma, es que tiene apenas 8 Liguillas de 19 posibles, menos de la mitad. El futuro no luce alentador, porque como ya se dijo en repetidas ocasiones, sin una empresa que inyecte dinero en el Patronato, cada vez será más complicado competir ante las carteras del norte o los demás grandes.
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La afición de Pumas hoy vive de recuerdos, los cuales son magníficos, pero se hacen viejos. Presumen el bicampeonato, el título ante Morelia, vencer al Real Madrid, ser base de la Selección en otras décadas, pero actualmente hay poco que alardear. Tras el título de 2011, Víctor Mahub estuvo un año más en la institución como presidente del Club Universidad, pero salió al cumplir su ciclo y le dio paso a Jorge Borja Navarrete.
Este personaje siempre fue criticado por tener otras prioridades en su vida antes que el equipo de futbol. Y los resultados jamás lo ayudaron. Durante su ciclo de cuatro años, el equipo llegó a cuatro Liguillas y en tres se quedó sin la oportunidad de pelear por el título. Su mayor logro llegó en 2015, cuando disputaron la final ante Tigres, pero no la ganaron y sólo vieron festejar al rival en turno en el Olímpico Universitario. La deuda del equipo llevó a la directiva siguiente a vender a Ismael Sosa, estandarte del equipo en aquel momento.
Luego de su salida del club, llegó Rodrigo Ares de Parga, un ambicioso personaje que gracias a su relación con una constructora, hizo obras de edificación en la Cantera y construyó cantera dos, pero los logros también se ausentaron en su periodo. Conocido más por sus escándalos extracancha, Ares de Parga pasó con puras penas y ninguna gloria. Dentro de su mandato, Pumas alcanzó sólo tres Liguillas y en cuatro torneos no clasificó. De esas tres veces que compitieron por el título, los eliminaron por goleadas estrepitosas en el marcador global. Ante Tigres cayó 7-2, posteriormente, ante el América, se fueron humillados 6-2 y 7-2, respectivamente.
Por sus escándalos, Ares de Parga no cumplió su ciclo y dejó a la institución de forma precipitada, pero necesaria. Leopoldo Silva, hombre de confianza de Enrique Graue, actual rector de la UNAM. En el mando, los auriazules consiguieron una Liguilla y una final, en contraparte, este Guard1anes 2021 no clasificaron. Incluso, tuvieron que vender a Carlos González, referente del plantel y quien jamás quiso irse, pero la situación financiera de los auriazules obligó a todas las partes a ceder.
De esta forma es como Pumas lleva 10 años sin poder competir más que en dos torneos donde logró colarse en la final, pero no logró conseguir otro título. La Copa MX ni siquiera pudo ser su deshago, como sí lo fue de otros equipos. Nunca tuvieron la opción de competir por ese título. Una década sin títulos que es un dardo en el corazón de todo el pueblo azul y oro que siempre alienta, pero que ya se cansa, poco a poco, de parecer un equipo chico sin pelear, sin presupuesto y sin títulos.
DANTE LÓPEZ CREE QUE PALENCIA LOS GUIÓ AL TÍTULO
Hoy, mientras el pueblo azul y oro lamenta una década sin títulos, el gremio de jugadores que consiguió la proeza en el 2011 puede recordar con nostalgia y sonreír. Sin reforzarse, con un gran torneo, levantaron el título de campeones tras la Final ante Morelia. Para Dante López, jugador vital en la obtención del título, el artífice principal fue Juan Francisco Palencia, quien marcó en el juego de ida y en el de vuelta para acercarlos a su séptima estrella.
“Quería volver a meter gol en una Final. Palencia estuvo enchufado ese día y nos llevó al campeonato. Era mi primera final de vuelta en CU. Hubo mucho nervio, pero también mucha expectativa por salir campeón. Llegamos con esa mentalidad de que no podíamos dejar pasar esa final en nuestro estadio. Fue lo más lindo y más por la forma en la que se dio. Quería meter ese gol para liberar la tensión, pero fue una jugada rápida y ya no me dio la posibilidad de rematar”, mencionó en charla exclusiva con ESTO.
Dante recuerda que lo más importante previo al torneo fue la charla que tuvieron como plantel. Ahí, dejaron claro que los objetivos se pondrían al pasar de los partidos. No pensaron ni siquiera en la clasificación, todo por no reforzarse y ser el segundo torneo de Guillermo Vázquez en Primera División.
“De lo que más recuerdo, es previo a iniciar el torneo. Ya con Guillermo Vázquez ratificado, hubo una charla en la pretemporada. Nos pusimos como meta ir partido a partido y no pensar ni en clasificar, por la etapa de recambio en la que estábamos. Había muchos chavos que se tenían que acoplar al equipo. Eso fue lo que pasó. Cada uno puso muchas ganas en escuchar a los compañeros y al estratega. Lo plantamos muy bien en la cancha y fue lo que nos llevó a salir campeones en ese torneo”, compartió.
Los juveniles como Javier Cortes y Emilio Orrantia fueron también trascendentales ante la falta de refuerzos. Ellos, desde su trinchera, ayudaron con goles y sacrificio. Incluso, “Javi” abrió el torneo con un golazo y así lo cerró, con una gran jugada individual que les otorgó la séptima estrella en la Liga MX.
“Ellos captaron bien la idea que el grupo quería. El cuerpo técnico puso mucho de su parte. Estábamos en una fase experimental, porque eran los primeros roces del técnico y de los juveniles. Nosotros quisimos hacer todo más confortable. Les dijimos que nos dejaran toda la presión a nosotros. Con esa seguridad que les brindamos, además del cuerpo técnico, captamos la idea y llegaron los resultados”, admitió.
El atacante paraguayo también aceptó que la suerte los acompañó durante esa campaña. Reconoció que sin una pequeña dosis de la misma, a veces, es imposible poder conseguir objetivos por lo impredecible que puede llegar a ser el balompié.
“Siempre influye la suerte un poco. No puedes estar dependiendo de eso, pero sí importa. Hay pelotas que uno nunca sabe la razón de que vaya afuera. En alguna carambola puede caer un gol que te complique un partido o un torneo. Nosotros tuvimos mucho de eso en el semestre y también nos ayudó”, cerró.
LUIS GARCÍA MOLESTO POR LA SUTUACIÓN
Mamita querida. Esa es la expresión de Luis García. En un abrir y cerrar de ojos Pumas cumplió 10 años sin ser campeón. Una cifra que deja frío a cualquiera. Si el Club Universidad es grande o no es lo de menos, sin embargo, se tiene que hacer algo: “Esta parte de la grandeza es difícil que la puedas perder, yo no comparto mucho estos títulos de equipo grande, chico o regional, en el futbol mexicano pocos repiten, el campeonato cambia de manos de forma importante, esta misma temporada cambiará otra vez, pero que tu pases 10 años, que son 20 torneos, sin ser campeón, habla de que hay algo que se está haciendo mal o que se venía haciendo mal hace algunos ayeres y hoy está explotando en la cara”, expresó Luis.
Que la final que alcanzó Pumas en el Guard1anes 2020 no maquille la realidad: “El semestre pasado el equipo fue subcampeón, pero fue muy de la mano de la circunstancia, hoy pues, ni siquiera calificaron al tema este del repechaje cuando entran 12 equipos, entonces está claro que hay una urgencia importante, el plantel de hoy no es un plantel boyante, hay poca gente emergida cantera y los que están son ya de cierta edad, pocos chavos y no están consolidados”, expresó.
La sequía sin celebrar es grave porque “pasar 10 años sin ser campeón es un número brutal, mamita querida, no estamos hablando de cualquier equipo”, dijo.
El 22 de mayo de 2021 “es una llamada de atención, pero está claro que esto no se resuelve en un día, se resuelve con mucho trabajo, se tiene que hacer mucho para poder cambiar de alguna manera la situación”, explicó Luis.
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