12, febrero 2021 - 11:49
nahuel-guzman
FOTO TWITTER @CLUBTIGRESOFICIAL
Terminó la aventura en Qatar. Tigres volvió a casa. El cuadro felino se quedó con el segundo lugar en el Mundial de Clubes y de inmediato tomó su avión de regreso a México.
Los universitarios volaron de madrugada y luego de 15 horas en el aire aterrizaron en el aeropuerto Mariano Escobedo.
El equipo felino llegó a Nuevo León a las 11:00 horas. Tigres subió a sus redes sociales una fotografía de Nahuel Guzmán con las palabras: “Hogar dulce hogar”. El Patón descendió del avión con su mochila y matera en mano.
Medios de comunicación locales acudieron al lugar en busca de alguna declaración de los auriazules, sin embargo, no lo lograron.
La seguridad del aeropuerto formó una valla para que los futbolistas caminaran sin dificultad y abordaran el autobús.
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?? Hogar, dulce hogar ? pic.twitter.com/JuNmTOYSf7
— Club Tigres Oficial ? (@TigresOficial) February 12, 2021
El camión del equipo llegó temprano, pero muchos jugadores prefirieron irse en sus autos particulares.
Javier Aquino, André-Pierre Gignac y Luis Quiñones fueron de los primeros en salir, sin embargo, no se detuvieron.
El francés se trasladó de inmediato a su casa para compartir el Balón de Plata que ganó con su familia.
El rango de espera entre uno y otro jugador fue largo, por tratarse de un vuelo internacional los jugadores tuvieron que detenerse varios minutos en migración.
Luis Rodríguez, Hugo Ayala, Carlos Salcedo y Carioca salieron en los siguientes grupos.
Jesús Dueñas fue recibido entre abrazos por sus hijos, la careta y el cubrebocas fueron indispensables.
La cifra que ganó Tigres tras quedar subcampeón del Mundial de Clubes
Ricardo Ferretti siguió. El Tuca saludó y se marchó. Carlos González, Raymundo Fulgencio y Guido Pizarro salieron juntos. El Conde, como sucedió en Qatar, fue el encargado de hablar con los medios de comunicación.
El ingeniero Alejandro Rodríguez y Diego Reyes caminaron a la par. Los jugadores iban acabándose.
Jordan Sierra, Francisco Meza y Nahuel Guzmán fueron los últimos en dejar el lugar. Todos siguieron su camino sin detenerse.
La llegada fue larga. Una hora y media transcurrió entre el primer jugador que salió y el último.
Tigres está en casa. El Mundial de Clubes y el Bayern Múnich son anécdotas. El cuadro felino entrena el sábado en el Universitario y se enfoca en su juego del martes frente a Cruz Azul.
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