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San Luis Potosí.- Lejos del debate de si puede ser considerado un Clásico o no, el llamado duelo de la 57 se pintó de azul y oro. Atlético de San Luis le ganó a Querétaro en un duelo donde gran parte de las emociones se reservaron para la parte final del encuentro y en el cual, Pablo Barrera su puso la capa de héroe al marcar un gol lleno de técnica individual en conjunto con un grave error de la defensa queretana.

German Berteráme adelantó a los locales tras aprovechar una falla grosera de Gil Alcalá; Madrigal puso paridad momentánea cuando el juego se hacía viejo el Dinamita puso cifras definitivas. 2-1 para un conjunto potosino que, al menos por ahora, deja el fondo de la clasificación general.

Lejos del debate de si puede ser considerado un Clásico o no, el llamado duelo de la 57 se pintó de azul y oro. Atlético de San Luis le ganó a Querétaro en un duelo donde gran parte de las emociones se reservaron para la parte final del encuentro y en el cual, Pablo Barrera su puso la capa de héroe al marcar un gol lleno de técnica individual en conjunto con un grave error de la defensa queretana.

German Berteráme adelantó a los locales tras aprovechar una falla grosera de Gil Alcalá; Madrigal puso paridad momentánea cuando el juego se hacía viejo el Dinamita puso cifras definitivas. 2-1 para un conjunto potosino que, al menos por ahora, deja el fondo de la clasificación general.

Una de las rivalidades más calientes en la Liga MX es la que protagonizan Atlético de San Luis y Querétaro cada vez que se encuentran. Para los seguidores de ambos equipos es un Clásico por el pique que existe entre ambas entidades, y aunque esta vez se celebró sin hinchas en las gradas, la expectativa entre ambas parcialidades era mucha.

Gallos Blancos parecía tener más argumentos por lo mostrado a lo largo de la campaña, pero fueron los locales los que le pusieron el número a la casa gracias a uno de sus hombres más regulares en lo que va del certamen: Germán Berterame.

Sin Nicolás Ibañez ni Mauro Quiroga en la oncena titular, Anderson Julio salió como el delantero nominal potosino y de sus pies nació el primer tanto.
El camiseta 11 se tuvo fe, disparó desde fuera del área y gracias al bote, el portero Gil Alcalá no pudo quedarse con la de gajos. Al escupir, Berte se encontraba listo para aprovechar el regalo y darle el pase a la red. ¡Gol de San Luis!

Querétaro, con la necesidad, se fue en busca del empate. Por momentos el juego se tornó muy ríspido y vinieron las patadas que trajeron tarjetas amarillas por todos lados, principalmente entre el Atlético.

Cuando el juego se acercaba a su recta final, Querétaro reacciono mediante Madrigal, quien se asoció con Perlaza con un par de toques dentro del área que concluyeron con un remate cruzado de Fernando que dejó sin posibilidades a Werner. ¡Gol de Gallos!

Con poco tiempo en el reloj, parecía que todo terminaría en empate, pero vino Pablo Barrera con la última palabra. El arquero Werner despejó largo, la despensa queretana no pudo despejar ni romper el esférico.

El dinamita se avivó, ganó la posición en el área y con un toque sutil, bombeó ante la salida de Alcalá para mandarla al fondo y decretar el triunfo potosino que sirvió para mantener el orgullo intacto y dejar de momento el último lugar general.

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