POR JAVIER JUÁREZ

Como si retrocediera el tiempo, a los años en blanco y negro, América y Chivas se reencuentran en CU en las semifinales de la Copa por México, el escenario es atípico, pero no desconocido para ambos, ese campo fue el nido de las Águilas antes de trasladarse al Estadio Azteca. En ese lugar Guillermo Sepúlveda en el Campeón de Campeones de la temporada 1964-1965 les dejó a los azulcremas una cicatriz eterna. Los capitalinos, perdieron el juego, pero lo que más les dolió fue la burla del Tigre…

Guillermo, a través de una llamada a su nieta Susana, atendió a ESTO: “El teléfono de mi abue sigue siendo el mismo, pero está roto un cable, no lo han arreglado, con gusto te lo comunico”, dijo.

Sepúlveda, con su voz grave, que intimida a cualquiera si no lo conocen, contestó: “Qué tal, dime para qué soy bueno”, rio Sepúlveda. Su sentido del humor es el mismo.

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El Tigre tiene 86 años, los recuerdos se alejan, pero la tarde en la que retó a los americanistas en Ciudad Universitaria, no se desvanece: “Hace muchos ayeres de eso, la rivalidad con el América siempre ha sido, es y va a ser siempre”, dijo Guillermo.

El Rebaño y las Águilas se enfrentaron en territorio universitario para definir al Campeón de Campeones de la temporada 1964-1965, también lo hicieron un año atrás.

La enemistad entre tapatíos y capitalinos apenas iniciaba, pero la acción del Tigre fortaleció la rivalidad.

“El campo parecía cuadrilátero, había muchos golpes, en un tiro de esquina Alfonso Portugal me pega, cayó junto a mí y le di una patada, sé que estuvo mal, me expulsaron”, dijo Sepúlveda.

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Guillermo se negó a salir del campo, pero a regañadientes abandonó la cancha. La impotencia era tanta que “pasé enfrente de la banca del América, les aventé mi playera y les dije ´con esta tienen y con esa tuvieron´”, narró y enseguida soltó la carcajada.

Sin dejar de reír Sepúlveda siguió: “Nunca se les va a olvidar, estoy seguro”, afirmó.

El Tigre lo ha dicho siempre “los americanistas me caen gordos”. Los juegos contra los azulcremas se tienen que ganar siempre “no importa que sean de preparación, con más razón”, dijo.

Sepúlveda espera “que gane el Guadalajara, esperemos que sea un buen partido”, pidió Guillermo.

El Tigre aseguró que “está bien de salud, con un poco más de año, pero en buenas condiciones”, contó.

Antes de colgar, Guillermo mandó saludos a su periódico predilecto: “Siempre los recuerdo a ustedes, a mis amigos de ESTO, les deseo lo mejor y que gane el Guadalajara”, sentenció el Tigre.