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11, julio 2020 - 22:59

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POR ALEJANDRO ALFARO

Cruz Azul le ha tomado por completo la medida a América. La Máquina, al igual que en los últimos Clásicos, le pasó por encima a su acérrimo rival y dejó claro que pese a ser un juego de preparación, no escatimaría a la hora de hacerle daño a los de Coapa.

Sebastián Córdova adelantó a los Millonetas con un golazo, pero fue todo del lado del ave. Los Cementeros de a poco se repusieron, trabajaron su juego y el Cabecita Rodríguez volvió a confirmarse como la pesadilla emplumada con gol y asistencia- 1-4 final que caló hondo en el Nido y se celebró en La Noria.

 

EL JUEGO

Tal como se esperaba, el encuentro entre América y Cruz Azul en la Copa por México fue todo menos amistoso. Desde que el juego se puso en marcha la intensidad de uno y otro bando fue total, al grado de que las faltas estuvieron a la orden del día, lo que hizo que el juego tardara en tomar ritmo por lo cortadas de las acciones.

Las Águilas apostaron por la tenencia de la pelota y no solamente eso, ya que ejercieron una presión alta a los Cementeros, que en más de una ocasión vieron comprometida su salida desde el cuadro bajo, al grado de que el primer gol de la noche caería de esa forma.

Yoshimar Yotún recibió el esférico en propio campo, pero no vio que Sebastián Córdova lo apretaría por la espalda. El mediocampista crema barrió, robó la pelota sin foul y posteriormente preparó un disparó tan colocado que ni el vuelo de Jesús Corona fue suficiente para evitar que entrara pegado a segundo palo. ¡Golazo de América!

A partir del gol en contra, La Máquina adelantó líneas y empezó a jugar más en el campo azulcrema, aunque sin llegar a ser del todo peligroso.

Jonathan Rodríguez, fiel a su costumbre, empezó a ser el hombre peligroso de los Cementeros. El uruguayo tomó la bola en los linderos del área, fintó a dos defensores cremas y entró solo al área; a la hora de definir buscó cruzar a Ochoa, quien con un lance espectacular mandó a tiro de esquina.

A pelota parada vendría el tanto del empate. La mala fortuna llegó para los de Coapa cuando Federico Viñas conectó la pelota con la cabeza contra su propio arco para convertir un autogol que puso el empate parcial.

Para el complemento, Cruz Azul se creció y a las Águilas se les vino la noche. Miguel Herrera hizo cambios que desajustaron su medio campo y pagó caras las consecuencias.

Casi al inicio del segundo tiempo, el Cabecita Rodríguez arrancó por derecha, se llevó puesto a Naveda y cuando Ochoa salió, le picó la bola de zurda. Un golazo del cementero para adelantar a su escuadra.
Llenos de confianza y sabiéndose superiores, los celestes fueron al frente y en cuestión de tres minutos liquidaron el juego. Primero al aprovechar un error de Escoboza en la salida. Romo robó la pelota, filtró a Alexis Gutiérrez, quien recibió el esférico y lo prendió con violencia para romperle el arco a Paco Memo.

En medio del desconcierto americanista, Rodríguez volvió a aprovechar espacios por derecha, vio libre a Pineda y tocó para que este definiera con un remate colocado y pegado a la base del poste izquierdo de Ochoa. ¡1-4 categórico!

Con el correr del segundo tiempo vino una gran cantidad de cambios por ambos bandos, pero el daño ya estaba hecho y Cruz Azul se sabía dueño del primer lugar del Grupo A.

Semifinales al momento de la Copa GNP

Las Águilas buscaban ir al frente, pero más por impulso que con algún tipo de argumento futbolístico.
Con esto, los azules se llevaron con paso perfecto el Grupo A y son candidatos a ganar la Copa por México. América esperará que Pumas no gane por dos goles a Toluca ya que de ser así, quedarán eliminados.

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