Foto: Mexsport

Uno de los episodios que marcó la carrera de Antonio Briseño fue el encontronazo que tuvo con Giovani dos Santos en la edición pasada del Clásico Nacional. Ahí, una dura entrada del central de Chivas le perforó la pierna al 10 de América en algo que hoy es una mera anécdota que el propio jugador cuenta.

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“Le mandé un mensaje (a Giovani), hablé con él y me contestó; tipazo, me dijo que no era fácil ni para él ni para mí, algunos tontos que estaban en la tele comentaron que fue intencional, jamás. Fue tonto, bruto, era un clásico, vi la bola de frente, tiro la patada, pero como todos los humanos, cierro los ojos cuando viene el madrazo y mi patada ya salió”, rememoró.

Ya con todo asimilado, el Pollo compartió el aprendizaje de aquella experiencia con respecto a la manera en que debe disputar las pelotas divididas.

“Me dejó con muchas enseñanzas, sé que no puedo ganar todas las bolas y bueno, de a poco fui ganando el lugar y queriendo ganar el clásico, fue algo que sí me marcó y lo hizo para bien”, dijo a TUDN.

Las reacciones que se generaron a raíz de ese suceso fueron muchas y Antonio fue blanco de diversos ataques e insultos en redes sociales. Incluso, lamentó que algunos ex jugadores lo calificaran como un jugador malintencionado.

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“Cerré mi Twitter, empezaron a meterse con mi familia, cosas que ya no se pueden, no leí, salvo uno que otro, me enganché, algunos fueron futbolistas y pensaron que fue de mala leche, si me conocieran, vieran como entreno, sería otra cosa, pero como tienen un micrófono, creen que pueden juzgar”, terminó.

Este torneo no ha sido sencillo para Briseño toda vez que no ha podido hacerse por completo de la titularidad en la zaga rojiblanca, por lo que trabaja para ganarse de lleno la confianza de Luis Fernando Tena.