La cima de la clasificación general del Ascenso MX amanecerá con tres inquilinos. Tampico Madero alcanzó en la posición de privilegio a Mineros y Correcaminos luego de haber doblegado 2-1 anoche en casa a un Atlante que ofreció poco, por lo que terminó por cosechar una nueva derrota en calidad de visitante.

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La polémica fue protagonista en este duelo, ya que la Jaiba Brava se impuso con un par de penaltis dudosos que fueron señalados con total seguridad por el silbante. Diego de Buen y Jesús Ocejo se encargaron en convertirlos en goles, mientras que Francisco da Costa había puesto el empate parcial en la primera mitad. El 2-1 final para los de casa, que de paso se declararon listos para el Clásico de Tamaulipas la semana entrante, en el que visitarán a Correcaminos, mientras que el Atlante hará lo propio en casa contra Cafetaleros.

EL JUEGO

Con la intención de no despegarse de los líderes del torneo, Tampico recibió anoche a Atlante a sabiendas de que una victoria los llevaría a alcanzar en puntos a los punteros del certamen.

Muy temprano en el encuentro la Jaiba encontraría la ventaja. Una falta de Israel Rivera dentro del área fue señalada al manchón, pese a que el mediocampista intentó quitar la pierna para evitar el contacto.

Metido en lo suyo, Diego de Buen hizo gala de su experiencia y buen golpeo de balón con una ejecución pegada al poste derecho del arquero Britos, quien nada pudo hacer para el 1-0.

La reacción azulgrana tardaría en llegar, pero aparecería antes de la recta final del primer tiempo. Irving Zurita tuvo un despliegue de velocidad y habilidad al desbordar por derecha, eludir la barrida de un zaguero y llegar a línea de fondo para tirar una diagonal retrasada a la que Francisco da Costa llegó puntual. Sobre la marcha, el brasileño impactó de primera y mandó a guardar la de gajos en las redes tampiqueñas.

Paridad en el marcador para el descanso y la moneda en el aire para el segundo tiempo.

Tras la reanudación, el encuentro se tornó ríspido. Ambas escuadras metieron duro la pierna y las tarjetas amarillas comenzaron a aparecer.

En cuanto a llegadas, poco de los dos, aunque sería Tampico el que recuperaría la ventaja.

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Pedro Vargas se plantó en la entrada del área y Prieto se impactó con él. La jugada fue polémica al dar la impresión de que el delantero fue quien buscó el contacto. Al final, nuevamente se señaló el penalti.

Esta vez, fue Jesús Ocejo el cobrador y con una gran técnica de golpeo, engañó a Britos y la puso arriba, inalcanzable para cualquier meta.

El cronometro siguió su andar y no hubo más que escribir a casa. La Jaiba impuso su ley.