POR HÉCTOR REYES

A un mes del deceso de la portadora de la antorcha olímpica durante los Juegos Olímpicos de México 68, Norma Enriqueta Basilio Sotelo, el Comité Olímpico Mexicano le rindió un homenaje póstumo, en el marco de la Asamblea General Ordinaria, con la presencia de sus hijos Mario, Enriqueta y Oliver Álvarez Basilio.

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El presidente de la Asociación de Medallistas Olímpicos Mexicanos Daniel Aceves dio lectura a la trayectoria de la afamada atleta mexicana, imagen que perdura en el Museo Olímpico de Lausana y en Grecia, en el lugar donde se enciende la llama olímpica y reposa el corazón del barón Pierre de Coubertain.

En el informe de labores Carlos Padilla Becerra recordó a la emblemática atleta que nació precisamente en las instalaciones del CDOM, en aquel año inolvidable de 1968, momento olímpico de la espigada atleta que voló sobre 93 escalones, iluminada de blanco como las miles de palomas que surcaron el cielo en una espiral, en el estadio de Ciudad Universitaria.

“Era muy necesario para nosotros hacer un público reconocimiento de la trayectoria de Queta Basilio de manos de sus hijos en un homenaje póstumo, se les entregó una placa que así lo acredita y esperamos seguir colaborando ellos con nosotros y nosotros con ellos”, externó el presidente del COM.

Olegario Vázquez Raña, en su calidad de presidente vitalicio del COM fue quien entregó la placa a los hijos de Queta Basilio. El empresario formó parte de la delegación olímpica de México 68 en la especialidad de tiro deportivo y fue testigo del recorrido que hizo la “Cachanilla”.

Enriqueta Álvarez Basilio agradeció a los asambleístas y seguramente dijo que su mamá donde descansa agradece y ellos como hermanos también, por  todo el cariño que han mostrado para ella y como familia tienen una gran responsabilidad de seguir lo que les enseñó y ser un buen ejemplo a las generaciones futuras.

Querétaro confía en la remontada

“El Comité Olímpico siempre nos ha abierto la casa, esta es nuestra casa, aquí nos criamos, aquí se criaron mis padres, y ojalá las generaciones futuras tengan las oportunidades que nosotros tuvimos para crecer, fuimos muy felices somos muy felices y hay que seguir con eso” externo Queta Álvarez, quien fuera seleccionada nacional de voleibol.