CRÓNICA

Por Alejandro Alfaro

Foto: Luis Garduño

San Nicolás de los Garza.- En el futbol el que perdona suele perder, y aunque la moneda quedó en el aire para el juego de vuelta, Tigres se cansó de fallar frente al arco de unas Rayadas que rescataron milagrosamente la igualada de Universitario y tendrán la oportunidad de saldar cuentas pendientes para la vuelta en su casa.
En el trámite las felinas fueron muy superiores, pero carecieron de contundencia para sacar una mejor renta del Volcán. En contraparte, a La Pandilla le bastó con una aproximación en tiro de esquina para poner tablas de por medio. 1-1 final gracias a los goles de Cruz y Mejía que deja a la Sultana del Norte en suspenso en busca de conocer a la campeona del balompié femenil. Tigres a repetir o Rayadas a arrebatarles el título de la categoría.

EL JUEGO
La cancha del estadio Universitario se convirtió en un auténtico volcán con el inicio de la final de la Liga MX Femenil. Los aficionados regiomontanos respondieron al llamado de sus equipos y ofrecieron un marco pletórico para los dos mejores cuadros del certamen, que por tercera vez se enfrentaban por la definición del título.
Con el conteo regresivo en la pantalla, vino el silbatazo inicial. A partir de eso empezó un monologo felino al que las Rayadas prácticamente no pudieron resistir.
En el amanecer del encuentro, el primer grito de gol hizo estallar a San Nicolás de los Garza.
Dentro del área, Lizbeth Ovalle se puso el traje de torera y metió un par de faenas que descontrolaron a la zaga rayada. Como pudo, la mediocampista auriazul sacó un disparo que la defensiva rechazó; sin embargo, el rebote le cayó a Belén Cruz para que ella le metiera la parte interna del pie derecho a la de gajos y con eso, la colocó a segundo poste, muy lejos del alcance de Claudia Lozoya, quien no tuvo más que acompañar a la bola con su vista y ver como se encontraba con las redes. ¡Gol de las campeonas!
Los minutos transcurrían y las albiazules no se encontraban en el campo. Ovalle y Martínez se insinuaban con mucho peligro, pero la contundencia no estaba de su lado.
Lizbeth se generó una gran oportunidad por la vía individual. Recortó a la última defensora rayada, entró al área y cruzó demasiado a la hora de definir. Martínez le recriminó el individualismo toda vez que ella se encontraba en mejor posición para concluir la jugada.
Liliana Mercado fue otra que puso a temblar a las Rayadas. La camiseta 7 de la U de Nuevo León se quedó a nada de conseguir un gol de antología cuando ejecutó un tiro de esquina desde el costado izquierdo con un efecto tan marcado que cerró y estuvo muy cerca de ser gol olímpico de no ser por la oportuna reacción de la portera Lozoya.
Del otro lado Monterrey brillaba por su ausencia. Desiree Monsivais estaba completamente sola en el eje de ataque y ninguna de sus compañeras lograba conectar con ella, lo que generó la desesperación en la goleadora de La Pandilla.
Para la hora de ir al descanso parecía corto el marcador con respecto a lo que se había exhibido en el trámite del cotejo. Le había salido barato a Monterrey.
Para el complemento y casi sin buscarlo, Rayadas encontró el empate. La táctica fija fue la llave que les abrió el cerrojo felino. Un tiro de esquina ejecutado hacia el área chica fue bien capitalizado por Annia Mejía. La mediocampista atacó el espacio al que la bola iba dirigida y al encontrarse sin marca, conectó con un potente testarazo que terminó en el fondo del arco de Solís. ¡Monterrey se metía al partido!
Pese a la anotación, poco cambió la dinámica. Tigres seguía al frente, con la iniciativa de buscar recuperar la ventaja. Las aproximaciones eran peligrosas, mas el último toque no era preciso. Martínez y Ovalle permanecían como las más incisivas, pero Lozoya les bajaba la cortina. El partido se hacía viejo y las locales no podían volverse a poner al frente.
Al final, Monterrey aguantó los embates de Tigres y la calentura subió tanto que con el silbatazo vino un conato de bronca en el que tuvo que intervenir el cuerpo arbitral y los técnicos para separar a algunas jugadoras. No hubo tiempo para más. La final regia femenil en su tercera edición ha quedado en suspenso, todo se definirá en el Gigante de Acero.

ACCIONES

GOLES