Enrique Bonilla, presidente de la Liga MX, rompió el silencio respecto a la afirmación de que Veracruz no jugará su partido ante Tigres. Aseguró que en caso de que exista una huelga, no servirá de nada ni hará que se les pague a los jugadores. El directivo insistió en que si no hay controversias presentadas, están atados de manos.

“Si ellos creen que con la amenaza se puede cambiar las leyes, las reglas, me da pena, pero no es por ahí el camino. El camino es con base a presentar las controversias, los argumentos válidos para que se les cubra, y se tomaría la decisión por parte de controversias. No le veo el camino de avance de detener el fútbol mexicano para que se pueda lograr algo”, comentó para el programa Fórmula Deportes.

“La reglamentación es clara, el equipo que no comparece se le aplica el reglamento y desciende automáticamente”, recalcó el presidente de la Liga MX respecto a la decisión de los jugadores por no presentarse.

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La situación por la que algunos jugadores no presentaron sus adeudos ante la Comisión de Controversias, es por la existencia de dobles contratos, ahora llamados “acuerdos verbales”, además del temor de no encontrar equipo en el futuro. Bonilla fue claro y señaló que de esas prácticas no se pueden hacer cargo, ni interceder.

“Hay procesos, instancias que, a través de los últimos años, funcionaron y permitieron que ningún jugador se quede sin cobrar. En lo personal nunca me había tocado un acuerdo verbal; ahora hablan de acuerdos verbales y eso no se recibe en tribunales ordinarios, ni en FIFA, y no veo como porque tendríamos que recibirlo aquí”, culminó.